El presidente del Govern, Francesc Antich, anunció ayer que el secretario de Presidència, Bartomeu Llinàs, y la integrante del equipo de Gobierno del Consell de Eivissa, Pilar Costa, sustituirán a las actuales conselleras de Educació i Cultura, Bàrbara Galmés, y de Interior, María Àngeles Leciñena, quienes dejarán su cargo en la remodelación del Ejecutivo autonómico. Ambos tomarán hoy posesión de sus nuevos cargos.
Antich puntualizó que la otra novedad es la fusión de los departamentos de Innovació, Interior y Justícia en una única Conselleria. Así, hasta ahora Innovació formaba parte del departamento de Economía, dirigido por Carles Manera, mientras que Justícia estaba integrada en la Conselleria de Presidència, liderada por Albert Moragues.
«Esta remodelación se produce en el ecuador de la legislatura, en una clara voluntad de reforzar y dar un fuerte empujón al cambio de modelo productivo de las Islas desde el inicio de legislatura, con el horizonte de la recuperación económica y de respaldar el pacto por la competitividad, ocupación y cohesión social», apuntó el president.
Antich agradeció la tarea desarrollada por ambas conselleras y destacó su «dedicación» durante los dos últimos años. Y sobre los nuevos consellers, Francesc Antich se refirió a Pilar Costa como «una persona avalada por una acreditada experiencia política y una capacidad de gestión reconocida». De Bartomeu Llinàs dijo que ha sido un estrecho colaborador suyo desde hace años y destacó que procede del mundo educativo, ya que fue director provincial del Ministerio de Educación, cuando aún no se había transferido la competencia a la Comunidad Autónoma.
En cuanto a las causas del cambio, Antich dijo que Bàrbara Galmés «ha encaminado objetivos fijados en los ámbitos de construcción y renovación de infraestructuras educativas y ha afrontado mucha presión externa».
Consultado por un eventual cambio en la Conselleria de Turisme, Antich aseguró que el actual conseller, Miquel Nadal, «está haciendo su trabajo de forma muy positiva y en colaboración con el sector turístico». Y sobre las consecuencias sobre su imputación, el president se limitó a reseñar que «siempre he actuado cuando una simple imputación de algún cargo público se ha visto agravada y volvería a hacerlo, pero el propio conseller ha dicho publicamente que se irá si esta circunstancia se produce».
Sobre una posible fusión de la Conselleria d'Agricultura con la Comerç, Industria i Energia, Antich adelantó que a principios de 2010 «está previsto que se produzca las transferencias de Agricultura a los consells, de ahí que entonces habrá que actuar, ya que no se pueden duplicar competencias. El gasto público está inflado y hay que reducirlo». Al respecto, anunció que está prevista la elaboración de una Ley del Sector Público, con el objetivo de controlar el gasto público en todos los departamentos.
En la elaboración de los próximos presupuestos de la Comunitat, indicó que se estudia unir empresas públicas, no conselleries y transferir competencias de juventud y agricultura para evitar duplicidad con los consells.
El president dejó claro que «he tenido las manos libres para realizar esta remodelación». Asimismo, dijo que ambos consellers, especialmente el de Educació «tiene en sus manos que los actuales directores generales sigan o no».
El El PP consideró ayer que la remodelación del Govern anunciada es una «tomadura de pelo» a la ciudadanía y que pone de manifiesto que el presidente del Ejecutivo balear, Francesc Antich, únicamente tiene «autoridad en las conselleries de su partido», ya que los cambios afectan a dos departamentos dirigidos por los socialistas, Educació e Interior, y a ninguno de los del resto de formaciones del Pacte. El portavoz del PP, Carlos Simarro, remarcó que la remodelación se ha realizado «de cara a la galería» así como que «evidencia» que Antich no es «capaz de ser presidente» en todos los departamentos. Así, indicó que estos cambios no van a suponer ninguna mejora económica para el Archipiélago.