El Govern quiere darle un acelerón a la reforma de la ley autonómica de Comercio que aprobó el pasado 31 de julio. La urgencia del Govern responde, según Barceló, a la necesidad de cumplir el compromiso de tener la nueva normativa aprobada a final de año, con el objetivo de que el sector balear esté perfectamente adaptado a la directiva europea de servicios más conocida como Bolkestein.
El proyecto de ley de reforma de la Llei de Comerç, que implica la modificación de artículos de la normativa actual, autorizaciones de las grandes superficies comerciales, tiene que estar aprobado antes de 28 de diciembre.
La nueva ley afecta a las autorizaciones de grandes establecimientos comerciales: superiores a 700 metros cuadrados en Mallorca, a 400 en Menorca y a 200 en Eivissa y Formentera.
Este periodo parlamentarios viene muy cargado ya que además del debate de la Comunidad, la próxima semana, se deben celebrar varias sesiones para aprobar los presupuestos. De ahí que el Govern haya solicitado el trámite de urgencia para la tramitación de la Llei de Comerc.