E. PRESS/ R.L.
La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat) se pronunció esta semana a favor de una reforma laboral en el sector y en un cambio en la figura del fijo-discontinuo, con una contratación ligada a la ocupación y no a fechas de inicio y fin de temporada.
El presidente de la patronal, Juan Molas, recordó que el sector da empleo a 1,5 millones de personas en toda España y apuntó que la contratación se ha recortado alrededor de un 10% en lo que va de año, 70.000 empleos menos. Por ello, insistió en que hace falta una «reforma laboral urgente».
Anunció que la patronal ha solicitado al Gobierno que estudie la posibilidad de poder contratar al personal temporal fijo-discontinuo en función de la ocupación y no tanto de la temporada, dada la tendencia actual de reservar a última hora, lo que obliga a las empresas a ser «muy cautas». Con esta medida, los hoteleros tendrían plantillas «más rentables» en función de la ocupación y las pernoctaciones.
Molas apuntó que verían con buenos ojos un Plan Renove 2010, con la «máxima dotación posible», dado el éxito de esta línea de crédito y abogó por una mayor cooperación entre la Administración central y Autonomías en materia de promoción en nuevos mercados emergentes como China o India donde, en su opinión, se requiere un nuevo concepto de marca.
Los hoteleros españoles prevén cerrar 2009 con una pérdida de rentabilidad del 15%, por efecto de la contención de costes y, en menor medida, por la caída de los precios.
Todo ello, pese a apreciar «cierta recuperación» de cara a los últimos meses del año, mejora que «no tendrá apenas incidencia», según estimó ayer Molas. «No hemos alcanzado la meta, la situación sigue siendo muy crítica, pero la mejora de expectativa da esperanzas y cierto alivio», apuntó el presidente de la patronal de patronales.
El 60% de los hoteleros opina que la rentabilidad descenderá, frente al 37% que considera que se mantendrá igual, según el Observatorio de la Industria Hotelera, elaborado junto a PricewaterHouseCoopers, presentado esta semana.
Molas insistió en que la temporada veraniega se ha saldado con un aprobado «muy justito», con una temporada baja más larga y la alta más corta, lo que ha favorecido al mercado español y al turismo de proximidad, que es «el que ha salvado la temporada».
De cara a 2010, el nivel de contratación será «igual o algo mejor», según los datos de reservas a través de touroperadores, con «ligeras mejoras en el mercado alemán y francés, con respecto al británico, que sigue igual de mal», apuntó Molas.
El Observatorio presentado incluye únicamente dos referencias a las impresiones de los empresarios por zonas turísticas: la previsión de la evolución de la oferta hotelera y de la estancia media. En ambos casos, los datos referentes a Eivissa y Formentera muestran que los hoteleros de las Pitiüses no vaticinan cambios significativos en ambos conceptos. Estas previsiones se inscriben dentro de la media nacional, si bien en el caso de la duración de la estancia, son numerosas las zonas turísticas en las que sus patronales prevén un acortamiento del periodo medio de reserva.