«Los vertidos incontrolados y los problemas de olor que producen, la falta de disciplina urbanística y el funcionamiento de la depuradora» se cuentan entre las principales «debilidades» del centro urbano de Santa Eulària, según los representantes sociales, culturales, medioambientales y deportivos del pueblo.
El Ayuntamiento de Santa Eulària cuenta ya con las primeras conclusiones del diagnóstico Dafo, en el que analiza las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades del municipio y que se realiza en el marco de la Agenda Local 21. Un estudio que recorrerá todas las parroquias de Santa Eulària para elaborar así una especie de auditoría interna a raíz de la opinión ciudadana sobre diversas cuestiones como planeamiento del territorio, sistemas naturales, agua, energía y residuos.
Impulsado por la Oficina de Litoral i Platges, el diagnóstico arroja sus primeros resultados. Por ejemplo, en el apartado de debilidades se suman también cuestiones como «la falta de educación de la gente» en cuanto a la concienciación medioambiental y la falta también «de información sobre el transporte público». La «contaminación acústica y lumínica», el «acortamiento de la temporada» y la «falta de estética en la construcción», también se incluyen en esta sección del diagnóstico.
En el apartado de «amenazas», los ciudadanos consideran la «supresión del autobús al aeropuerto», «el abandono de la zonas rurales», la «calidad del agua de baño» y la «salinización de los acuíferos» como algunos de los aspectos que pueden empeorar en el municipio, a los que suman también la «recepción negativa de la posidonia», la «sobrepesca» y la «masificación del tránsito marítimo».
En la sección de fortalezas, destacan «la buena red de agua depurada para el riego», «la convivencia intercultural», «la zona rural cuidada», «el buen nivel de bienestar y la integración social». También agregan «la calidad de vida» y «una tasa de juventud elevada».
Por último, en el apartado de oportunidades o de objetivos a mejorar, los resultados indican la necesidad del «fomento de productos locales y el sector primario», «la reutilización de agua depurada», así como la necesidad de «potenciar el transporte público», entre otros.
Hoy, la elaboración del diagnóstico continuará en Puig d'en Valls.