Prats pide a Santa Eulària que retire el contencioso y deje de «entorpecer» la reforma de la carretera

El conseller de Mobilitat, Albert Prats, cargó ayer contra el alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, y le acusó de «engañar a los ciudadanos» y «a su propio partido» al decir que desconocía el proyecto del carril bici de la carretera de Sant Miquel «cuando lo conoce con todo lujo de detalle, como muy tarde, desde septiembre de 2008».
Prats pidió también a Santa Eulària que retire el contencioso administrativo que interpuso contra la construcción del vial ciclista porque «entorpece el trabajo de los técnicos» y podría generar «muchos problemas para poder ejecutar esta carretera». «No es que nos preocupe el resultado del contencioso porque todo se hizo de acuerdo a derecho. Lo que pasa es que, si de verdad el PP cree que se deben agilizar los trámites y que se deben hacer obras, lo que tienen que hacer es no paralizar los servicios jurídicos de la casa. Aquí hay muy mala fe de intentar poner palos en las ruedas», afirmó.
Un plano con firma y sello
Según Prats, Marí sabía del trazado del vial ciclista, no sólo por haber mantenido reuniones sobre el tema, sino también porque a lo largo de 2008 los técnicos municipales debieron incorporar al plano de la carretera el diseño del colector de Santa Gertrudis que transcurrirá de forma paralela al carril bici. Un documento que cuenta «con la firma del alcalde y el sello del Ayuntamiento» y que, en su memoria, dice que «el emplazamiento de la obra (el colector) se situará al margen derecho en dirección a Santa Gertrudis de la carretera PM-804, siguiendo el trazado del carril bici», citó Prats.
Se trata de una de las respuestas al contencioso que presentará el Consell la semana que viene en los tribunales y, mediante la cuál, el conseller quiere demostrar que el recurso interpuesto por el Ayuntamiento se debe a «puro oportunismo político». Prats indicó que este documento «demuestra que Santa Eulària tenía perfecto conocimiento del carril bici, de su trazado, configuración y anchura; meses antes, incluso, de la aprobación inicial, que fue en marzo de 2009». Una aprobación, recordó, que contó con el voto a favor del PP, «porque, según ellos, el proyecto era beneficioso para la economía y los ciudadanos», pero que después se convirtió «en rechazo frontal cuando salieron quejas de algunos vecinos afectados». Entonces, según Prats, los populares «dijeron que no habíamos presentado el proyecto a los ayuntamientos, que no habían visto el proyecto del carril bici ni tenían conocimiento de su trazado, que no lo habían visto nunca, en definitiva», recordó. «Eso se llama oportunismo y se llama engañar a los ciudadanos. Esta persona (Vicent Marí) tal vez no merezca la confianza de los ibicencos», concluyó.