El ex president del Govern Jaume Matas ha defendido su inocencia en una entrevista concedida en exclusiva a IB3 Televisió ayer en un hotel de Madrid, después de haber abonado los tres millones de euros exigidos por el juez del 'caso Palma Arena' en concepto de fianza para eludir la cárcel.
Esa medida cautelar, unida a la retirada del pasaporte y la obligación de presentarse de forma regular en el juzgado, fue muy criticada por Matas, ya que le han supuesto «un trastorno irreparable» en su vida, debido a que residía y trabajaba en Estados Unidos, según ha recordado.
«La verdad es que es una situación muy difícil. No tenía planificado que me quitasen el trabajo sin hacer nada», ha afirmado Matas, que se siente «víctima de un juicio paralelo».
«Me he quedado sin trabajo. No sólo es la fianza, que es absolutamente desproporcionada, yo estaba trabajando, a eso me dedicaba, tenía un muy buen contrato en una compañía americana», explica Matas.
En la entrevista, Matas planteó que en este caso «alguien» puede tener interés en hacer «sentencias sin juicio» y en «arruinarlo» y añadió que, si bien «ésta no ha sido la voluntad del juez», las consecuencias sí son ésas. En cuanto a su futuro laboral, ha afirmado que mientras no pueda abandonar el país se establecerá «como profesional liberal» en España y, de no encontrar trabajo, recuperará su plaza de funcionario. Respecto a la supuesta financiación irregular del PP balear en la campaña de 2007 -cuando concurría a la presidencia de Balears- que investiga el juez y que se habría llevado a cabo mediante la agencia de comunicación Nimbus, el ex ministro ha indicado que «las campañas electorales no las llevan los candidatos de ningún partido, porque los candidatos están para otras historias».
«Hay unos gastos -ha afirmado- que se deben contabilizar, llevados al Tribunal de Cuentas, que demostrarán que la financiación del PP era legal».
Comisiones
En cuanto al supuesto cobro de comisiones para conceder contratos de IB3 a una empresa del productor Jose Luis Moreno, Matas ha apuntado que «es la más esperpéntica de las acusaciones» del caso y que la persona que denunció estos hechos, Luis Velasco, «no tiene ninguna credibilidad».
«Muchas», ha sido la respuesta de Matas a la pregunta de si rectificaría algo de lo que ha hecho, ya que, según ha explicado, mientras «a otros ciudadanos se les debe demostrar que son culpables», él tiene que probar que es inocente.
«Bien, ya me defenderé», ha añadido. Con respecto al sobrecoste millonario de Palma Arena, (de 48 millones de euros pasó a los 110), el ex presidente dijo: «En la administración pública española se puede presupuestar por un importe determinado y acabar con otro muy distinto, muy por encima, por causas que se pueden justificar. Puedes hacer un proyecto por 40 y te puede costar 200. En Mallorca hay ejemplos, la Fundació Moneo y la reforma del Parlament. En el Palma Arena no ha habido desviación de fondos, sino un proyecto que comienza de una forma y acaba de otra. No tomé ninguna decisión administrativa, porque el presidente toma sólo decisiones políticas. Y siempre lo hice desde la dignidad».
Al defender su inocencia, dijo. «Tengo derecho a la presunción de inocencia, no soy culpable de nada, y tampoco de ningún delito, sobre todo mientras no se demuestre. Se ha violado mi derecho a la intimidad sin haber de por medio ninguna condena».
Matas reconoció que no había declarado 50.000 euros, «que provienen de la gestión de mi familia», e insistió en que eso «no es ningún delito y no tiene nada que ver con el Palma Arena ni con la gestión de fondos públicos». Admitió que había telefoneado al fiscal superior de Balears, Bartomeu Barceló, «sólo para pedirle un poco de ecuanimidad». Y con respecto al gasto desmedido, dijo: «El 90% de la ostentación que ha salido publicada es mentira, y el resto se puede explicar.»
Con respecto a las escobillas de baño de alto valor, señaló: «Había un decorador que ayudó mucho a mi mujer en la reforma del piso. En vez de cobrar, nos ofreció comprar material de la tienda. Mire, el juicio previo ya está hecho, lo han conseguido, pero yo he de defender mi verdad. A mí me han hecho mucho daño, todas las personas relacionadas conmigo y mi familia están hoy perjudicadas. Han destrozado mi futuro, que habré de recomponer, he tenido que pedir favores...y todo ello sin haber hecho nada. Pero he aprendido que hay cosas que valen la pena: tengo una mujer, una madre y unos hijos que son lo mejor que he tenido en mi vida».
El ex presidente del Govern, que ha admitido que si no encuentra trabajo, «volveré a mi plaza de funcionario», también se refirió a la manifestación convocada por la Plataforma Anticorrupción: «Lo entiendo perfectamente, pero ese sentimiento legítimo que pueden tener los ciudadanos, no puede ser a costa de gente inocente. Tienen razón, pero no por ello se ha destrozar la vida de gente inocente. Se ha de respetar la justicia y eso significa respetar la verdad. Un político no puede tener privilegios, pero tampoco menos. Entiendo a esa gente, esa parte no es nueva para mí, sé que es porque he gobernado. Siendo ministro de Medio Ambiente me van a montar una manifestación contra el Plan Hidrológico, mire ya estoy acostumbrado y lo puedo entender».
Rectificación
Admitió que rectificaría «muchas cosas» de las que hizo, y matizó: «Ahora tengo la batalla de este proceso judicial y he de demostrar que soy inocente. A otros ciudadanos se les ha de demostrar que son culpables, yo he demostrar que soy inocente. Bien, me defenderé. Sigo queriendo las cosas que quería antes, creo en lo que creía antes. Más adelante, cuando todo haya pasado, hablaré de política».
Matas insistió, asimismo, en que desde hace siete meses que intentaba declarar ante el juez, «después de escuchar muchas cosas, mi abogado fue a la Fiscalía, y le dijeron que no era nada, sólo unas diligencia secretas por unas denuncias anónimas. El tema de que eran secretas fue de risa, porque cada día en los medios de comunicación, y de forma tergiversada, se podía leer de todo».