El mundo rural de Eivissa y Formentera recibirá cinco millones de euros, aproximadamente, dentro de las líneas de ayuda del Programa de Desarrollo Rural Sostenible que ayer dieron a conocer la consellera de Política Patrimonial i Agrícola, Marga Torres, y el director general d'Agricultura i Desenvolupament Rural del Govern, Toni Perelló, a los representantes de los ayuntamientos de las Pitiüses. El Plan destina 28 millones de euros para el desarrollo del mundo rural en Balears y está financiado a partes iguales por Estado y Govern. Perelló señaló que, según los indicadores que marca el Ministerio de_Agricultura como densidad de población, despoblamiento o renta per cápita, Eivissa y Formentera recibirán un 20% de los 28 millones de euros. Explicó que en los indicadores para elaborar la ley se aplicaron criterios que no tuvieron en cuenta las condiciones insulares: «Castilla La Mancha o Andalucia no son lo mismo que las islas. En la financiación quedamos un poco descolocados y por primera vez se hizo contar un poco la insularidad».
La reunión de ayer fue la primera para la aplicación de la Ley de Desarrollo Sostenible que se aprobó en Consejo de Ministros y que implica «comenzar a trabajar en los planes de zona de cada isla», dijo Marga Torres. La consellera explicó que se trata de «una ley innovadora en la que participan todas las comunidades e implica un plan a largo plazo para trabajar en el mantenimiento y potenciación de las zonas rurales».
Las actuaciones que se van a realizar a través de este plan son diversas, como las agrarias, energías renovables, infraestructuras, vivienda, educativas o culturales. Anunció que desde su departamento «se dará un impulso al contrato agrario porque pensamos que es una figura que será muy importante en Eivissa e iremos complementando con otras acciones que serán las que irán aportando desde los ayuntamientos».
A partir de ahora se abre un periodo de consultas hasta septiembre para recoger todas las aportaciones sobre el mundo rural e incluirlas en el plan de zona. En el caso de Eivissa hay un porcentaje de población que se dedica a tiempo parcial a la agricultura por lo que se quiere impulsar el contrato agrario para el mantenimiento de las fincas. «La idea es hacer una prueba piloto este año en el Pla de Corona para comenzar a trabajar el contrato agrario de 2011 a 2015», explicó Torres. El contrato agrario se establece con el propietario para el mantenimiento de la finca en buen estado para que «todo lo que conforma el paisaje esté en buenas condiciones».
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