El conseller de Salut, Vicenç Thomàs, mantuvo ayer una reunión de trabajo con profesionales del Àrea de Salut d'Eivissa y Formentera para conocer los proyectos sanitarios que se prevén desarrollar en los próximos meses.
Según explicó, «son cambios funcionales y proyectos de futuro», que se desarrollan como un trabajo paralelo de reorganización de los diferentes servicios a la vez que se construye el nuevo hospital de Can Misses.
Entre estos proyectos, el gerente del área de Salut, Julio Villar, destacó la puesta en marcha «en breve» de una unidad de reproducción asistida que evitará los desplazamientos de «muchas parejas» a Palma, una solicitud que se había realizado desde el servicio de ginecología. «Estamos modificando las maneras de trabajar y las posibilidades de atender problemas nuevos», agregó el conseller.
En cuanto a la reorganización, Villar señaló como prioritaria la potenciación de la Atención Primaria. «Se trabaja en dos líneas, una es la resolutiva, con medidas como un mejor acceso a la tecnología, desde monitores de tensión arterial en todos los centros a la telemedicina, y también está la coordinación estrecha con el hospital», indicó, y puso como ejemplo el traslado del servicio de traumatología a los centros de salud, «para aproximar la resolución de estos problemas que generan una importante lista de espera». En este sentido, el conseller recordó que Sant Antoni tendrá su propio servicio de ginecología, a la vez que el hospital de Formentera cuenta con consultas de otorrinolaringología.
El conseller destacó que en estos tres años de gestión (ver apunte) han conseguido mejorar los recursos humanos, «un tema del que muchas veces se habla y con muy poca propiedad», destacó el conseller.
En este marco, Villar recordó que un «problema» que ha tenido repercusión fue la falta de profesionales en el área de oncología, «una plantilla que ahora está cubierta» con tres especialistas en contacto con los oncólogos de Son Dureta.
Thomàs: «Estamos consiguiendo situar a Eivissa en primera división»
Thomàs hizo balance de sus tres años de gestión al frente de la Conselleria. «Estamos consiguiendo situar a Eivissa en primera división», indicó, y recordó la reducción de las tarjetas sanitarias por médico en un 14%, «pasando de 2.161 en 2007 a 1.851 en 2010» así como un aumento del 10% en la cantidad de profesiones desde 2007, que pasaron de ser 808 a 880. Por otra parte, el conseller reconoció que el año «no empezó bien» en cuanto a las listas de espera quirúgica, con 65 días de media, que fueron reducidas en junio a 55 días. Por último recordó la inversión en infraestructuras de 137 millones de euros, con tres nuevos centros de salud, dos en construcción, y la creación del nuevo hospital.