Almudena Torres tiene 19 años y siempre había querido tener un perro en casa. «Me enteré por mi madre de que se celebraba la tercera jornada de adopción responsable de la asociación Ibiza 4 patas. Fuimos y la verdad es que nos pareció una iniciativa muy buena. En principio queríamos adoptar a una cachorro, pero nos decantamos por el schnauzer 'sin nombre'. Finalmente, me ha costado 19 años tener un perro», cuenta antes de puntualizar que este can de año y medio no tenía nombre y por eso le llamaban así el pasado sábado: «Ahora he pensado un nombre y creo que se llamará Bicho porque es muy inquieto».
Durante la mañana de ayer, esta joven acudió al centro de recuperación animal de Eivissa para recoger a su nuevo compañero de vida, que siempre había vivido en estas instalaciones: «El sábado estuve con él de paseo por Vila y la verdad es que congeniamos bastante bien».
Si bien Bicho se mostró ayer altamente inquieto antes de recibir los primeros gestos de cariño de Almudena, ésta no pudo ocultar su emoción al explicar cómo serían las primeras horas de Bicho en casa. «Ya le he comprado la correa y el comedero. Esta tarde [por ayer] le compraré la cama, mañana [por hoy] ya tiene cita para la peluquería porque tiene el pelo muy largo y esta semana irá al veterinario. Va a ser el rey de la casa», asegura esta joven siempre ha tenido muy claro que si tenía un perro sería adoptado, nunca comprado: «De pequeña les tenía algo de miedo, pero fui creciendo y me fueron gustando cada vez más. Siempre he sabido que si tenía uno sería adoptado porque no tienen a nadie y los que están en las tiendas sí que tienen un dueño, el propietario del establecimiento».
Durante la mañana de ayer, Giusseppe Guastella, de la asociación Ibiza 4 patas, recibió a los futuros propietarios de los 14 perros que encontraron un hogar el sábado pasado dentro de la tercera jornada de adopción responsable. Guastella afirmó que estaban bastante contentos con el número de adopciones conseguidas, pero que aún queda mucho trabajo por hacer.