El instituto Santa María de Eivissa recibió ayer el certificado de calidad ISO 9001:2008 por su mejora en la organización documental y el funcionamiento del centro. El acto de entrega de esta acreditación se celebró en el salón de actos del instituto abarrotado de alumnos y profesores del centro de secundario pionero de Eivissa.
La directora de Planificació i Centres del Govern, Elvira Badia, que entregó la certificación a la directora del instituto, Teresa Marí, subrayó que esta certificación supone «la mejora de la calidad del sistema educativo; muchas veces cuestan entender estas certificaciones en el mundo educativo pero realmente todos los centros que han logrado esta certificación están muy contentos porque han demostrado que pueden llegar a mejorar su funcionamiento y organización y, por tanto, mejotrar sus resultados que es lo que siempre queremos en el mundo educativo».
Finales del siglo XIX
Al comienzo del acto, la profesora del instituto Teresa Torres hizo una breve introducción de la historia del centro cuyos inicios arrancan a comienzos del siglo XVIII en unas dependencias del antiguo Convent en Dalt Vila. En 1835 pasó a ser propiedad del Ayuntamiento de Eivissa y en 1864 se convirtió en centro autorizado para colegio de segunda enseñanza inaugurándose un año después con menos de 30 alumnos. No será hasta 1962 cuando se construyó el nuevo edificio. Durante mucho tiempo fue el único centro de secundaria hasta que se construyó el Blanca Dona en 1979. Perecisamente a ese instituto se tuvieron que trasladar tras la detección de aluminosis en la estructura por lo que fue necesario derribarlo. En 1989 se inauguró el edificio tal y como se conoce actualmente que cuenta con 900 alumnos este curso.
El acto de ayer contó con la presencia de representantes de las diferentes instituciones como el conseller insular de Política Educativa, Marià Torres, que recordó su «estreno» como catedrático de Lengua y Literatura Catalana en este instituto: «Tengo un recuerdo muy agradable de quellos años». Irantzu Fernández, concejala de Juventud de Vila, subrayó que «la calidad es un camino sin fin». Para disponer de esta certificación el centro lleva trabajando desde hace tres años y ha pasado por diferentes auditorías de Aenor.
Pendientes de Sant Antoni
Educació sigue pendiente del informe del Consell Consultiu acerca de la rescisión del contrato de la empresa encaRgada de las obras del instituto Sant Antoni. «Esperamos que en un mes y medio tengamos oportunidad de tener el informe y según lo que diga podían continuar las obras del instituto». De hecho, Badia no descarta que si el informe está hecho en esas fechas se podían acabar las obras ya que quedan cuatro meses de trabajo. «Si lo tenemos entre enero y febrero podrÍan estar acabadas las obras para septiembre».