El Grupo Popular del Consell Insular d'Eivissa criticó ayer «la mala gestión» del equipo de gobierno de Tarrés y les acusó de ser «incapaces hasta de aprobar unos presupuestos que no sean ficticios e irreales como lo habían sido hasta ahora».
La consellera popular, Carmen Domínguez, recordó que éste es el segundo año que el equipo de gobierno es incapaz de cuadrar y aprobar los presupuestos del Consell antes de final de año y que, como viene siendo habitual, «confían en dinero que les llegue de fuera para salvar la situación».
Domínguez recordó que la vicepresidenta ya había anunciado que el presupuesto «se verá reducido en un 7% y pasará de 100 a 93 millones de euros pero que no reducirá en las contrataciones de personal sino que recortará en subvenciones a ayuntamientos y asociaciones, lo que, teniendo en cuenta la situación en la que estamos, no consideramos que sea lo más oportuno».
Piel de oso
La consellera popular, además, recordó que la práctica habitual del equipo de gobierno para elaborar los presupuestos «hasta ahora ha sido vender la piel del oso antes de cazarlo confiando y contando con la llegada de partidas de los gobiernos amigos o de venta de patrimonio que no se ha llegado a materializar».
En este sentido, Domínguez advirtió que para 2011 los presupuestos generales del Estado destinan a Balears un 40% menos dinero que el año anterior mientras que, por su parte, del Govern de les Illes Balears «tampoco se puede esperar mucho más cuando se le reclaman 4'2 millones para el Hospital Cas Serres y no han llegado ni los 500 mil que prometieron, o cuando no han querido ni materializar el traspaso de las competencias en promoción turística».
Todo esto, según Domínguez, «es lo que nos ha llevado a tener siempre unos presupuestos irreales y ficticios y, por consiguiente, a lo que ya advirtió el portavoz del PP, Pere Palau, en su crítica a los primeros presupuestos cuando señaló que todo el presupuesto acabaría yendo sólo para pagar al personal».
La gestión de Tarrés, aseguró Dominguez, «es una pesadilla para los ciudadanos porque no sólo no han solucionado sus problemas sino que los han agravado en estos difíciles momentos y esta pesadilla debe acabar el 22 de mayo de 2011 cuando gobierne el Partido Popular y aporte las soluciones que Tarrés y su equipo no saben dar».
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