El Govern y la banca han acordado hoy formar grupos de trabajo para buscar soluciones a los problemas de financiación del sector inmobiliario y entre las posibilidades que estudiarán se encuentra la de dar salida al stock de viviendas propiedad de las entidades financieras mediante su alquiler.
La voluntad de seguir dialogando es la principal conclusión de la reunión del presidente del Govern, Francesc Antich, y los consellers de Economía y Hacienda, Carles Manera; y Vivienda y Obras Públicas, Jaume Carbonero, con representantes de 14 entidades financieras con presencia en Baleares para analizar la situación financiera del sector inmobiliario y buscar fórmulas de estabilización.
Uno de los objetivos de la reunión era buscar estudiar cómo financiar más de 1.200 viviendas de protección oficial que no se construyen en Balears por falta de financiación, de las que 400 son del Govern, y tras el encuentro, Carbonero ha dicho al respecto que deberán seguir estudiándose posibles soluciones.
«El posicionamiento actual es que las promociones de vivienda nuevas que en estos momentos están pendientes de créditos hipotecarios por parte de las entidades financieras van a tener muchísimas dificultades», ha asegurado Carbonero. El Instituto Balear de la Vivienda (IBAVI) podría buscar financiación mediante créditos ICO o con el Gobierno central.
Voluntad de seguir dando crédito
Por su parte, el director general de Sa Nostra, Pau Dols, ha recordado que hay un problema de liquidez en el mercado pero ha puntualizado que las entidades financieras viven de dar crédito y ha dicho que su voluntad es seguir dándolo.
«La voluntad es seguir dando crédito y de hecho se está dando, aunque en menor medida que otros años», ha dicho Dols que ha facilitado los datos de la entidad que dirige, Sa Nostra, que «ha renovado créditos por valor prácticamente de 2.000 millones de euros en el año 2010, con lo cual negocio hay».
Dols ha insistido en que las entidades apuestan por «colaborar» en fomentar el acceso a los créditos hipotecarios aunque las garantías que se pidan ahora son superiores, por intentar «que la confianza se recupere lo antes posible», así como por promover el alquiler y dar salida al remanente de viviendas de la banca.
«Hemos planteado la conveniencia de dar salida al stock que hay pero a la vez tener en cuenta la deslocalización», ha dicho Dols, en el sentido de que aunque dicho remanente de viviendas «es elevado», las dificultades para ponerlas en el mercado varían en función de su ubicación.
«Unos municipios tienen un stock de vivienda que requerirá su tiempo pero en otros municipios hay que ser conscientes de que para dar solución a la demanda hay que seguir construyendo», ha dicho Dols.
A la espera del comportamiento de los precios
El director general de Sa Nostra considera que hay una importante demanda que aún está «un poco retraída» a la espera de lo que ocurra con los precios, después de que todas las entidades financieras los hayan bajado, pero ha dicho al respecto que, de cara al futuro puede haber algún descenso «puntual pero no general».
El conseller de Vivienda ha adelantado que los grupos de trabajo buscarán soluciones como la intervención de la Sociedad Pública de Alquiler y el IBAVI para absorber parte del remanente de viviendas de la banca y facilitar su alquiler; o que los solicitantes de los créditos hipotecarios no sean los promotores inmobiliarios sino también comunidades de propietarios o cooperativas.
Carbonero ha dicho que el Govern puede además insistir en la fórmula que ya aplicó de dedicar 60 millones de euros a comprar stock de vivienda, calificarlo como protegida y destinarlo a compra-venta o alquiler.
Han participado en la reunión representantes de La Caixa, Sa Nostra, Caja Madrid, Colonya Caixa Pollenca, CAM, Banca March, Banco Santander, Bancaja, Cajamar Caja Rural, BBVA, Banco Popular Español Es Credit, Banco Popular Hipotecario, Ibercaja y Caixa Catalunya.