La consellera de Medi Ambient de Formentera, Silvia Tur, anunció ayer la remisión inmediata a la Guardia Civil de «una solicitud formal de intervención a través de la unidad de los GEAS, el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas, para que hagan una inspección y un informe relativo a los hechos denunciados públicamente (fondeos incontrolados en praderas de posidonea) y procedan dentro del margen de sus competencias y de su ámbito de actuación».
El motivo según Tur es que «el Consell de Formentera no puede hacerse cargo unilateralmente de una situación cada vez se torna más grave, que crece exponencialmente en cuanto el riesgo sobre nuestro fondo marino, que no es competencia del Consell y ante lo que las administraciones no pueden escudarse diciendo que no tienen medios, no tienen dinero o están en crisis, pues tienen la obligación de cumplir con estas tareas inspectoras y sancionadoras y desde Formentera exigimos más que nunca que las instituciones cumplan con sus obligaciones, que es lo que deben hacer».
Tur reconoció que las informaciones aparecidas en un medio de comunicación sobre los destrozos causados por las embarcaciones fondeadas en el Parc Natural de ses Salines en las praderas de posidonea oceánica ya las conocía de primera mano: «Desgraciadamente no es una situación que nos coja de nuevo porque se trata de algo que ya se produjo en años anteriores, por lo que hay que incidir en la denuncia de esta situación que tiene efectos tan adversos para la conservación de las praderas de posidonea y mostrar asimismo el malestar por esta situación».
La consellera de Medi Ambient indicó que el Govern Balear no ha instalado las boyas ecológicas que se colocaban en es Caló de s'Oli y en s'Espalmador «presuntamente por falta de dinero, pero todavía a día de hoy no he recibido ninguna comunicación oficial, notificación o explicación, simplemente no se han instalado y eso es realmente una situación muy grave».
Dejadez del Govern
Para Tur, como comunidad autónoma, «merecemos un suspenso» y apuntó la necesidad de una «autocrítica porque no hay excusa posible para llegar a la situación a la que se ha llegado», coincidiendo con el cambio de gobierno. Tur explicó que el pasado martes tenía prevista una reunión con la directora general de Medi Natural del Govern Balear, Neus Lliteras, al que no pudo acudir por una indisposición pero que en breve se entrevistará con ella para «trasladarle la gravedad de los hechos sucedidos y en especial por un asunto igualmente grave como es que este año no se han colocado las boyas ecológicas en las zonas de fondeo regulado que es competencia del Govern, boyas situadas en la zona de es Caló de s'Oli entre la bocana de s'Estany des Peix y Punta Pedrera, así como en la zona de la playa de s'Alga en s'Espalmador. El Govern Balear no puede dar la espalda al problema ni mirar hacia otra parte».
Para la consellera es lamentable que las primeras actuaciones siempre deba emprenderlas el consell cuando no debería ser así. «El Parc Natural está funcionando únicamente con dos agentes de Medio Ambiente (AMA). Eso es insostenible y si encima no tienen ninguna embarcación difícilmente pueden ir barco a barco para dar información y en cuanto a la Demarcación de Costas lamentablemente los medios que tiene brillan por su ausencia, desconozco por qué se están produciendo una serie de situaciones, lamentables, no sólo a efectos de embarcaciones y fondeos sino de otros tipos y me gustaría saber cómo piensa la Demarcación de Costas dar cumplimiento a sus funciones y obligaciones cuando ni tan siquiera tiene una embarcación en Formentera y además ha efectuado un recorte de plantilla que ha hecho inviable su operatividad».