No habrá copago sanitario mientras el president del Govern, José Ramón Bauzá, «pueda evitarlo». Eso es lo que él mismo aseguró ayer en el Parlament, en respuesta a una pregunta formulada por el portavoz del PSM-IV-ExMen el Parlament, Biel Barceló. El diputado había expresado su temor ante la posibilidad de que en Balears se imponga la tesis defendida por el máximo responsable del IB-Salut, Juan José Bestard, que se ha mostrado favorable a esta fórmula de financiación de la sanidad.
El president se mostró contundente en su primera intervención al negar que el Ejecutivo esté estudiando esta opción, cosa que sí sucede en otras comunidades gobernadas por el PP. «No estoy de acuerdo con el copago», señaló. Barceló aseguró que las palabras de Bauzá le «tranquilizaban», ya que el nuevo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, también ha dejado abierta esta posibilidad. Aún así señaló que la implantación de la nueva tarjeta sanitaria es un copago encubierto.
La contundencia con la que el president contestó en su primera intervención vino matizada después, cuando aseguró que no habrá copago «mientras yo lo pueda evitar». En primera instancia aseguró que el Govern está valorando todos los argumentos y afirmó que lo que debe hacerse es adelgazar la Administración, conseguir más recursos por esta vía y no «aplicar la presión» a los usuarios de la sanidad.
Impuesto de patrimonio
El último pleno del año sirvió para certificar que Balears no cobrará el año que viene el impuesto de patrimonio por el que podía haber ingresado 23 millones de euros. Este hecho dio alas a la oposición para criticar que el Govern no penalice a quien más tiene para poder destinar este dinero a políticas sociales. La portavoz del PP recordó que fue el PSOE quien decidió eliminar este impuesto al considerarlo en su día «confiscatorio» y «obsoleto».
El diputado socialista Antonio Diéguez aseguró que el Govern tiene que recurrir a la deuda con los bancos por no cobrar este impuesto e insistió en que los presupuestos están mal hechos «debido a la presión de las entidades bancarias». Para la diputada del PSM-IV-ExM Joana Lluïsa Mascaró, es un «insulto a los ciudadanos» que el Govern deje de ingresar estos 23 millones cuando no tiene dinero para pagar las cantidades que debe a asociaciones y ciudadanos.
El PSOE teme que el PP quiera construir 100 viviendas en Benirràs
El conseller de Medi Ambient i Ordenació del Territori, Biel Company, insistió ayer en que no desprotegerán nada «que sea digno de protección» en Roca Llisa, Benirràs y Punta Pedrera. «Solo queremos devolver a la situación normal una urbanización que ya estaba allí», dijo Company, que aseguró que está claro lo que es suelo urbanizado y lo que no. Company aseguró que el diputado del PSOE Joan Boned y él coinciden. «Vi declaraciones suyas en un diario con las que coincido», dijo en referencia a unas palabras del socialista en las que se mostraba abierto a desproteger lo ya urbanizado.
Boned remarcó que para él algo urbanizado es una unidad de actuación parcelada y «100% urbanizada con todos los servicios terminados», pero no una «calle asfaltada con cuatro farolas», porque eso es «un fraude urbanístico». «Nos tememos que la interpretación con la que se trabaja es esta última», indicó Boned, que se refirió a las palabras del alcalde de Sant Joan, que anunció que quería hacer cien viviendas en Benirràs.
Propuestas de los propietarios de Eivissa contra los incendios
La diputada del PP Virtudes Marí resaltó ayer en el Parlament que no gestionar los bosques supone un «gran peligro». «Debido a políticas tremendamente demagógicas los tenemos abandonados, estamos sentados encima de un polvorín», lamentó Marí.
El conseller de Medi Ambient, Biel Company, recordó que están redactando nuevos planes forestales y que se llevará a cabo una campaña de información a propietarios de Eivissa para que puedan proteger sus fincas. Explicó que la semana pasada mantuvo una reunión con personas afectadas por los incendios y con la nueva asociación de propietarios forestales. «Salí muy satisfecho, aunque algunas propuestas las acogí con más reservas porque no sé si se pueden hacer», aclaró Company, que resaltó que el presidente del Consell es «insistente» («no quiero decir que sea pesado», bromeó) y le dice que la gente en Eivissa «está muy sensibilzada con este tema». Por eso se hizo una primera reunión y se repartió un formulario para que los afectados hagan llegar sus propuestas.