El conseller balear de Medi Ambient, Biel Company, aseguró ayer que la nueva depuradora de Vila que se tiene que levantar en sa Coma es una «obra prioritaria» y por eso ha pedido al Gobierno central que destine presupuesto para su construcción en 2013, ya que en las cuentas de 2012 no se ha podido incluir debido a la «situación económica». El conseller aseguró que el Ministerio ya ha empezado a hacer los trámites de redacción del proyecto y que ahora «el problema real es el dinero».
También hay problemas para la recepción de las obras ya terminadas de la nueva desaladora de Santa Eulària. Según explicó el conseller, el conflicto es que se tienen que recibir para su gestión todas las plantas ya construidas de Balears que ha construido el Ministerio en los últimos años y entre ellas hay una de Ciutadella cuya viabilidad económica está en entredicho. «Una desaladora le cuesta al Govern en mantenimiento tres millones anuales, tanto si funciona como si no y en Menorca se hizo para una urbanización en Ciutadella donde se usa muy poca agua», remarcó Company, que aseguró que en el caso de Santa Eulària no habrá problema porque espera que sí que haya demanda.
Coste doblado
Si no hay imprevistos, el conseller espera que dentro de un mes y medio se pueda llevar a cabo la recepción. Una vez se ponga en marcha, el coste de la desaladora se revertirá a los usuarios a través de la factura del agua. Recordó que esta instalación, que paga el Ministerio, tenía un coste inicial de 14 millones aunque ha acabado elevándose a 26.
Por otro lado, Company rechazó que sea un buen momento para traspasar las competencias en materia de aguas a Eivissa, tal y como pidieron el Consell y los municipios. «No entra en nuestros planes, tenemos problemas mucho más grandes», indicó recordando que la Isla también debería asumir toda la deuda en tema hidráulico, que asciende en Balears a 150 millones.
El conseller visitó ayer las obras de remodelación de la desalinizadora de Vila, que han costado 9,8 millones y que han permitido incrementar notablemente su capacidad. Los responsables de la planta remarcaron que los cinco nuevos pozos de captación de Talamanca funcionan muy bien porque dan un agua de mayor calidad que la que ofrecían los de Botafoc, que ahora mismo están en ‘stand by' por si hubiera algún problema. Por otro lado, las obras de la de Sant Antoni (4,3 millones) estarán acabadas a final de año.
El PTI en la ley del suelo y no antes
El conseller Company, que también gestiona Ordenació del Territori, descartó que se pueda aprobar alguna normativa específica para incluir el desarrollo pleno del Plan Territorial (PTI) de Eivissa, tal y como pedía el Consell. Según Company, en temas de territorio «siempre decidirá Eivissa», pero hay enmiendas, como esta para desarrollar el PTI ibicenco, que no se podían incorporar al decreto urbanístico y que se incluirán en la ley del suelo, que tiene que estar en el Parlament antes de final de año. El presidente insular Vicent Serra había pedido agilizar este tema para poder aprobarlo antes.