La inversión en construcción (residencial y turismo, menos obra pública) aumentó en el primer trimestre del año más de un 30% en las Pitiüses, pasando de los 18,5 millones de euros que se registraron entre enero y febrero de 2011 a los 24,4 millones del primer trimestre de este año, según los datos facilitados por la Asociación de Constructores de Balears. Sin embargo, este incremento no significa que el sector tenga indicios de recuperación.
Prudencia
«Son datos que se tienen que consolidar; tenemos que esperar a ver cómo se desarrollan abril, mayo y junio. Pero en cualquier caso significan que estamos yendo menos mal. Lo cierto es que la inversión que hubo en el primer trimestre de 2011 fue bajísima. Por eso tenemos que ser cautos y prudentes a la hora de hablar de mejora en el sector, porque el año pasado estábamos muy mal», aseguró Manuel Gómez, gerente de esta asociación profesional, que puntualizó que lo «importante» de los datos del primer trimestre «es que se ha sostenido la caída en el sector».
Este incremento respecto a los tres primeros meses del año se debe en su mayoría a las cifras que se han invertido en modernización turística, tanto hotelera como de oferta complementaria, que pasó de los 1,1 millones del primer trimestre del año pasado a los 6,2 millones que se destinaron a reformas turísticas entre enero y marzo de este año, según los datos que maneja la Asociación de Constructores de Balears. Si la tendencia a invertir en reformas turísticas continúa al ritmo que ha empezado este año se podrían superar los 12,2 milliones de euros que el sector destinó el año pasado a esta rama del sector (en 2010 únicamente se invirtieron 3,6 millones en reformas turísticas).
Manuel Gómez explicó que es en este punto donde el sector debe seguir apostando para que se produzca su reactivación: «De acuerdo con la Ley General Turística, a partir de septiembre y octubre se podrá poner algo más en marcha la modernización turística, siempre que los ayuntamientos agilicen la concesión de las licencias de obra y permisos». En esta misma línea, Gómez afirmó ayer que a los destinos turísticos «no les queda más remedio que la reconversión» y destacó el «proceso de cambio» que están viviendo las Pitiüses. «Tenemos que reconvertirnos para seguir siendo atractivos y así dar una respuesta de calidad a la demanda. Tenemos que ser más variados en la oferta para evitar ese agotamiento del turista que nos visita desde hace años», concluyó el gerente de esta asociación.