Numerosos vecinos de Vila se encontraron en la noche del Vuit d'Agost con una celebración inesperada en el puerto de Eivissa que provocó problemas para dormir a más de uno por el elevado volumen de los altavoces. La Asociación de Vecinos y Comerciantes del puerto organizó en la zona del monumento a los corsarios una fiesta ‘dance' con la presencia de Rebeka Brown que comenzó antes de los fuegos y se prolongó hasta las 2,30 de la madrugada. El acto no estaba previsto en ninguno de los programas de las Festes de la Terra ni había sido anunciado.
El evento contaba con permiso del Ayuntamiento de Eivissa y según explicaron ayer fuentes del Consistorio, el concejal de Turismo y Comercio, Ignacio Rodrigo, controló que la música se apagara a las 2,30 de la madrugada, hora hasta la que tenían autorización. De hecho, fue el regidor el que apagó personalmente el generador que daba suministro a la música.
El problema que se dio después es que pasada esta hora un yate que se encontraba en el puerto, el Medussa, puso música alta. Ante ello, el propio concejal avisó a la Policía Portuaria, que tienen las competencias en esa zona para que obligara a pararla.
Los vecinos
Enrique Welcker, presidente de la Asociación de Vecinos y Comerciantes del Puerto, explicó ayer que llevaban preparando esta fiesta desde hace seis meses y que contaban con un permiso municipal otorgado el 30 de julio. Welcker recordó que ya habían organizado esta fiesta el año pasado, aunque en otra fecha, y que este año quisieron hacerla el 8 de agosto para que hubiera algo antes de los fuegos y para mantener a la gente en el puerto más allá del final del espectáculo pirotécnico. «Es una fiesta para entretener y para revitalizar la zona, porque antiguamente los fuegos terminaban a las doce y media y la gente desalojaba el puerto enseguida», explicó este vecino, que aseguró que este año hubo más afluencia gracias a esta artista y a los dj's.
Wecker indicó que no se puso la actividad en el programa de fiestas porque es algo organizado exclusivamente por la asociación y por una emisora de radio, por lo que lo único que hicieron fue solicitar el permiso.
los bares del puerto unidos al concejal de turismo de Vila, ese Rodrigo. No queda nada mas por ver.Ni unos podian llegar a tanto, ni Vila a menos.Ya esta visto cómo funcionan. Que dimita el concejal de turismo o le cese la alcaldesa.