El ahorro sí puede estar unido a la calidad. Una afirmación que puede causar extrañeza sobre todo si se refiere al mundo de la sanidad, uno de los sectores más afectados por los recortes, pero así se desprende de los resultados de un estudio elaborado por Jorge Llosá y Rafael Torres, de Atención Primaria del Área de Salud de Eivissa y Formentera, en que se ha analizado si la aplicación de un protocolo de dispensación de tiras reactivas para la medición de glucemia en diabéticos supone una medida de ahorro en la gestión y si afecta a la calidad en los controles de los pacientes diabéticos. El protocolo se elaboró ante la percepción existente de la entrega de tiras de glucemia a los pacientes sin unos criterios establecidos.
El estudio se recoge en un póster, que se llevó el primer premio de la Sociedad Española de Atención Sociosanitaria en el VIII Congreso Nacional de Atención Sociosanitaria, que lleva el siguiente título: «¿Podemos tomar medidas eficaces y eficientes sin afectar a la calidad en la atención de nuestros pacientes crónicos?». Su respuesta, según los resultados del estudio, es que seis meses después de la aplicación de un protocolo se ha reducido el consumo de las tiras, «se ha producido un ahorro económico y ha mejorado el indicador de calidad del mal control del paciente diabético». En sus conclusiones aseguran que la aplicación del protocolo «es una medida eficiente de gestión y sin afectar, incluso mejorar, a la calidad del cuidado del paciente diabético crónico».
El segundo premio otorgado por la Sociedad Española de Atención Sociosanitaria versa sobre el impacto económico del uso de antibióticos parenterales en dos centros sociosanitarios sobre el hospital de referencia, cuyos autores son Santos Navarro, Esperanza Estaún, Laura Arroz y Nieves Riera, del hospital Residencia Cas Serres y del Servicio de Farmacia de Can Misses.
Durante la clausura del VIII Congreso se entregó, además, el primer premio a un póster que versa sobre la valoración de la sobrecarga del cuidados principales del paciente geriátrico, elaborado por profesionales del Hospital Gregorio Marañón; y gestión del exudado y reducción de los tiempos de cicatrización, cuyos autores proceden del Hospital Universitario de Alicante.