La Asociación de Rent a Car de la Pequeña y Mediana Empresa de Eivissa y Formentera (Pimeef) ha criticado el «nuevo ataque» del Govern contra el sector, tras presentar el impuesto que deberán abonar las empresas de alquiler de vehículos por daño ambiental.
Según ha manifestado la patronal en un comunicado, «llama la atención la obsesión que tienen algunos políticos con nuestro sector» y, como ejemplo, han recordado el «absurdo proyecto de la autotasa de 2005, que tenía como excusa la financiación de la sanidad».
«Ahora la excusa es el medio ambiente y, por ello, la tasa variará en función de la carga contaminante de los vehículos, de manera que los eléctricos estarán exentos y los híbridos tendrán bonificaciones», han manifestado.
Los empresarios de rent a car han lamentado que «nadie se ha parado a pensar cuántos de los vehículos de alquiler que circulan por nuestras carreteras pagan sus impuestos en algún municipio de las islas o dónde tienen sus sedes sociales». También han criticado que no se adjunte un plan de introducción de zonas de recarga para vehículos eléctricos, «lo que equivale a reconocer que el medio ambiente es la excusa para este nuevo mazazo fiscal».
Asimismo, han destacado que «es una incongruencia la aplicación del impuesto todo el año cuando la barbaridad sólo podría implantarse en temporada alta y hacer servir como excusa la desestacionalización». «Ni para esto tiene imaginación el Govern», han dicho desde PIMEEF.
El sector también ha lamentado que, cuando todavía no tienen noticias sobre la normativa de los taxis pirata, el Govern «nos vuelve a golpear con virulencia, sin consultar, quedando en el aire las fórmulas del devengo del impuesto».
«Está claro que nuestro sector no tiene la fuerza de otros que sí consiguieron dejar de ser recaudadores de un impuesto, pero debe quedar claro que éste tendrá un impacto terrible sobre las pequeñas y medianas empresas, la mayoría de las Pitiusas, que trabajan con unos márgenes de rentabilidad más ajustados», han añadido en el comunicado.
Por último, los rent a car han destacado que se grava a un sector que permite la movilidad de los turistas en las islas, por lo que al penalizarlo fiscalmente, se potencia más que el visitante no salga del hotel, con consecuencias negativas para la economía.