Dirigentes de las principales organizaciones empresariales de Balears fueron ayer al Parlament a aplaudir a la izquierda y a cuestionar al Govern del PP por su decisión de aprobar tres impuestos de nueva creación e incrementar otros.
Los representantes de la patronal corearon, en ocasiones con aplausos, las intervenciones del PSIB y de Més y expresaron sus desacuerdo con las del PP. Al final del debate, portavoces de entidades empresariales anunciaron recursos judiciales y se ofrecieron a colaborar con la oposición. Nunca se había vivido una situación así en el Parlament. Un diputado del PP, Antoni Camps, empezó su intervención ‘confesando' que nunca se imaginó proponiendo impuestos y el vicepresidente económico, Josep Ignasi Aguiló, tuvo que soportar gestos de desaprobación. En una sala superior del Parlament, donde se seguía el debate por circuito cerrado de televisión, los gestos de rechazo fueron menos comedidos y los aplausos a la oposición más sonoros.
El president Bauzá, que se dirigió directamente a los representantes de las patronales, mantuvo que de no ser por la herencia que recibió del anterior Govern no habría tenido que tomar esas medidas.
El Parlament escenificó ayer la soledad del Partido Popular. Antoni Pastor, aún alcalde de Manacor pero fuera del PP (milita en el PI de Jaume Font y Melià) votó a favor de las enmiendas a la totalidad (es decir, de rechazo al proyecto) que defendieron Joana Lluïsa Mascaró (Més) y Antoni Diéguez (PSIB). Antes, en el turno de preguntas al Ejecutivo, también Biel Barceló y Francina Armengol, afearon a Bauzá su apuesta por los impuestos.
¿Cierre patronal?
Cuando los nuevos impuestos estén vigentes, se gravará el alquiler de coches sin conductor, los envases y a las grandes superficies. Teóricamente se trata de impuestos ‘verdes o medioambientales'. Así los identificaron tanto el portavoz económico del PP, Antoni Camps, como el vicepresidente Aguiló.
El socialista Diéguez, que desplegó toda su carga irónica habitual para rechazar las medidas del Govern, auguró que al vicepresidente Aguiló le queda poco tiempo en el Ejecutivo. Afirmó que ahora que le queda poco tiempo, tendrá tiempo para continuar con sus «reflexiones teóricas». Mascaró también reprochó a Aguiló su «tono teórico y profesoral, alejado de la realidad».
Francina Armengol había advertido en sus turno de preguntas que los nuevos impuestos propuestos por el Govern «convertirán a Balears en la Comunidad Autónoma más cara de España», lo que redundará, a su vez, «en una pérdida de competitividad frente a otros destinos turísticos».
Bauzá dijo que la aprobación de las nuevas medidas tributarias responde a la necesidad de tener que hacer frente a una deuda de más de 6.000 millones de euros, fruto de la «herencia recibida» del anterior Govern del Pacto que, según dijo , dejó a la Comunidad con un déficit del 4,2%.
Después del pleno, algunos dirigentes empresariales comentaron con los medios su disgusto con lo oído en la sesión plenaria. Tanto Bernat Coll (Pimeco), como Pep Mayol (superficies comerciales) y Ramón Reus (coches de alquiler) afirmaron que estudiarían medidas futuras. No se da por satisfechos con los «13 cambios» que, según el vicepresidente económico Aguiló, se aceptarán en el plazo de discusión de enmiendas parciales.
«El vicepresidente no nos escucha, ni nos cree ni quiere saber nada de nosotros», lamentó Ramón Reus, presidente de la Asociación Empresarial de Vehículos de Alquiler de Baleares (Aevab), quien anunció que su organización hará «lo imposible para que este impuesto no se aplique».
Ramón Servera, de Pimeco, planeó incluso la posibilidad de «un cierre patronal». Sin embargo, no se ha adoptado ninguna medida en concreto. Los representantes de la patronal se limitaron a comentar con los medios las diferentes posibilidades.
Enmiendas parciales
El pleno se había iniciado con un importante apoyo al sector empresarial de Balears. El consejo de Turismo de la CEOE había advertido que el sector empresarial de las Islas «perderá competitividad» y quedaría «en situación de desventaja. Otros asuntos de la sesión plenaria quedaron ayer en segundo término dado lo inédito de la situación, es decir la amplia presencia de representantes de las patronales del sector. Como en cada pleno, el president fue preguntado por sus negocios y las declaraciones de renta y patrimonio. Bauzá señaló que nunca mintió aunque hubiera algún «error».
Los impuestos, de cumplirse las previsiones del Govern, entrarán en vigor en mayo. Ahora, llega el debate de las enmiendas parciales.