La alcaldesa Marienna Sánchez-Jáuregui quiso dejar claro ayer que su renuncia se debe a una cuestión administrativa y que dimitirá «por responsabilidad política, cosa que no hacen políticos de toda España». «No me quitan los ciudadanos, me quita una comisión de información. Quiero asegurarles que en estos casi dos años que he estado al frente del Ayuntamiento jamás he faltado a mis principios de honradez, honestidad, equidad y sentido de la justicia», añadió.
Como era previsible, Jáuregui y los tenientes de alcalde Juan Daura y Lina Sansano votaron en contra de las conclusiones de la comisión de investigación, que reprueban sus actuaciones en este caso, en el que todos están implicados.
Para la alcaldesa, hay una «desproporción entre los hechos y el ruido generado» que no tiene otra explicación que la existencia de «una intención oculta, unos intereses inconfesables a los cuáles hago tapón y es vital, por ello, que yo me vaya», lanzó. «En un futuro no muy lejano los hechos me darán la razón y los ciudadanos que estén atentos pronto adivinarán o descubrirán unos hechos que darán sentido a mis palabras», auguró.