El Consorcio Eivissa Patrimonio de la Humanidad ha iniciado el expediente para contratar los trabajos de recuperación de los espacios exteriores de la Casa de la Cúria, en Dalt Vila, cuyo presupuesto asciende a 241.100 euros.
Desde el Ayuntamiento de Eivissa han explicado que las obras podrían iniciarse en octubre y que la zona de actuación comprende una superficie de 804 metros cuadrados. El proyecto prevé la finalización de la remodelación de los espacios exteriores como espacio de uso público y contempla la protección, conservación y puesta en valor de las estructuras históricas existentes, así como la adecuación del acceso desde la calle Santa María.
Según las previsiones, las obras tendrán un plazo de ejecución de cuatro meses, tras la adjudicación de los trabajos. Este proyecto, promovido por el Consorcio, tiene por objeto la puesta en valor de las estructuras históricas defensivas existentes, como los lienzos de muralla que delimitan el lugar o los restos patrimoniales hallados en el transcurso de la ejecución de la primera fase.
Además, se busca la recuperación para el uso público de uno de los escasos espacios abiertos existentes en el casco histórico de Dalt Vila. En la primera fase de los trabajos, ejecutado en los años 80, ya se desarrolló una importante remodelación del espacio exterior puesto que se despejó una área central.
En esta segunda fase, las actuaciones consisten en desarrollar los acabados, la integración y conservación de los nuevos restos patrimoniales, la remodelación del acceso desde la calle Santa María y la iluminación del lugar, junto con la preinstalación de una iluminación ornamental dentro del proyecto lumínico de las murallas de Dalt Vila.
Tal como han destacado los arquitectos redactores, «la actuación no altera los parámetros urbanísticos existentes, manteniendo el uso actual sin contemplar ninguna edificación o instalación de nueva planta, siendo el uso como espacio libre y zona verde compatible con el grado de protección de la zona».
Asimismo, han incidido en que «la intervención prevista se adapte a la geometría del espacio público en el cual se actúa y se exprese con un lenguaje austero compatible con el entorno patrimonial, haciendo uso de una reducida paleta de materiales».