Puertos del Estado ha puesto en marcha el proyecto ‘Faros de España', una iniciativa con la que pretende desarrollar el uso complementario de estas instalaciones y contempla la posibilidad de ubicar hoteles en los mismos, una práctica habitual en numerosos países europeos y que actualmente no existe a nivel nacional.
Muchos faros españoles se usan ya para usos alternativos (visitas, fines culturales, hostelería...) como es el caso del de Formentor, que alberga un restaurante, o el de Finisterre en Galicia, que da cabida en sus instalaciones a una sala de exposiciones.
Sin embargo, hasta el momento no se había planteado la implantación del uso hotelero porque esta actividad está restringida, aunque cabe la posibilidad de solicitar una autorización expresa del Consejo de Ministros o del Ministerio de Fomento, según explicaron fuentes de Puertos del Estado.
«Las viviendas de los fareros han quedado vacías y permiten estas alternativas», señalaron las mismas fuentes, para después subrayar que las posibilidades van desde la instalación de una casa rural hasta un hotel, en función del tamaño, ya que existen faros en los que han vivido hasta cinco familias.
El proyecto, que previsiblemente arrancará tras la constitución del grupo de trabajo en la primera quincena de noviembre, podría solicitar la permisión para el uso hotelero de los faros de forma genérica o bien pedir las autorizaciones pertinentes en función de los planes concretos.
En cualquier caso, la materialización se llevaría a cabo de concesiones administrativas que otorgarían las Autoridades Portuarias.
España cuenta con 387 faros, de los que entre 50 o 60 están habitados, aunque los técnicos no se dedican exclusivamente al mantenimiento de sus instalaciones, sino que prestan ayuda a la Autoridad Portuaria pertinente.