La Plaça de Sant Jaume, de Barcelona, se llenó ayer de cientos de ciudadanos que se solidarizaron con la manifestación de Palma en contra de la política educativa del Govern.
La dimisión del president del Govern, José Ramón Bauzá, fue el grito más coreado por la gente que llenó el espacio comprendido entre las fachadas de la Generalitat de Catalunya y el Ajuntament de Barcelona.
Muchos de los participantes en la manifestación se vistieron de verde, algunos con las camisas de protesta compradas en Mallorca. Al final de la concentración, convocada por el Comitè de Suport de Barcelona a la vaga indefinida de docents de les Illes Balears, se leyó un manifiesto y se exigió la dimisión del presidente Bauzá. Dos horas antes, en el céntrico barrio de Gracia se había celebrado un recital poético en contra de la aplicación del decreto de trilingüismo.
Protesta
Según los datos de la Guardia Urbana, la protesta ha reunido a unas 1.500 personas. Detrás de la pancarta con el lema ‘La vostra vaga, la nostra dignitat. Solidaritat amb la vaga indefinida de docents'.