El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, ha asegurado que la futura Ley de Seguridad Ciudadana contribuirá a disponer de una nueva regulación «más sistemática y mejor» que servirá «para diferenciar perfectamente» lo que es el ejercicio del derecho de las personas a manifestarse con lo que son actos «puramente vandálicos».
Martínez se ha referido así a la futura normativa en una entrevista en la radio autonómica IB3, después de los acontecimientos que se produjeron en Madrid la noche del pasado sábado, y que, según ha dicho, «es un ejemplo muy bueno para saber diferenciar el derecho que tienen los ciudadanos de manifestarse contra aquello que consideran que debe cambiar con lo que son las conductas violentas».
El número dos de Interior, ha señalado que no entiende que la nueva Ley esté siendo muy criticada por el aspecto relativo al régimen sancionador, ya que, tal y como ha constatado, la cuantía máxima de las sanciones, de hasta 600.000 euros, es la misma que se mantiene vigente de la ley anterior.
«Lo único que ocurre es que ahora se establece una sistemática distinta, diferenciando entre el tipo de delito, pero la cuantía máxima sigue siendo la misma», ha remarcado.
Con todo ha apuntado que la futura ley contribuirá de forma decisiva mejorar la seguridad pública, regulando actuaciones como la práctica de «vandalismo aeronáutico», que responde a personas «que intentar deslumbrar a pilotos con láser cuanto están realizando maniobras de despegue o aterrizaje, poniendo en peligro la vida de las personas que van en ese medio de transporte».
Así, Martínez ha constatado que en los primeros 10 meses del pasado año se produjeron 350 casos de este tipo de vandalismo «que podían haber provocado una tragedia, y que, aunque parezca increíble, a día de hoy no están recogidos en ninguna ley del ámbito de las administraciones administrativas», ha argumentado.
En concreto, el secretario de Estado de Seguridad ha precisado que en el aeropuerto de Son Sant Joan se produjeron 17 casos de vandalismo con láser y en el de Eivissa otros 22, «lo que responde a conductas que pueden tener efectos trágicos sobre la vida de las personas».
Para el número dos de Interior, las críticas vertidas por deferentes grupos políticos y también por entidades ciudadanas deberían ir más allá y abordar otros muchos aspectos que regulará la futura normativa y no centrarse únicamente en los mismos temas.
Según Martínez, en Baleares se ha incremento el número de efectivos de Fuerzas de Seguridad lo que se ha traducido, ha señalado, en «una reducción de las tasas de criminalidad en la Comunidad Autónoma», lo que repercute a su vez positivamente en la seguridad de los ciudadanos de las Islas y también en el turismo.
«La delincuencia se va reduciendo en Baleares, que es cada vez una comunidad más segura», ha remarcado, al tiempo que ha abogado por «dar la protección que se merecen, tanto la Policía y la Guardia Civil, porque hacen un servicio público que los ciudadanos valoran y reconocen», ha apostillado.