La consellera de Educació, Cultura i Universitats, Joana Maria Camps, ha defendido hoy el presupuesto de su departamento para 2014, con un aumento del 2,29 % respecto a 2013 hasta los 747 millones y que implicará que «el PP hará posible acercar el trilingüismo a las clases humildes y universalizarlo».
En el debate parlamentario de los presupuestos, Camps ha reclamado a socialistas y MÉS que digan de dónde sacarían el dinero para incrementar el presupuesto de Educació cuando está condicionado por el hecho de que 3 de cada 4 euros se dedican a pagar nóminas y el 84,6% del total son nóminas y mantenimiento de centros, de manera que queda escaso margen para el resto.
Partidas insuficientes, según el PSIB
La diputada socialista Cristina Rita ha advertido de que los presupuestos no incluyen partidas para aplicar los dos proyectos estrellas del PP en educación que son el Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL) del trilingüismo y la FP dual y, aunque han subido un 2,29 %, siguen siendo 6 millones inferiores a lo destinado en 2012 y «están muy lejos de los últimos elaborados por el equipo de gobierno de la anterior legislatura».
Según Rita, las partidas de Educación son insuficientes para responder a las necesidades educativas y culturales actuales, reflejan un «rumbo errático e improvisador y no basta tampoco para poner en marcha el TIL». «Están buscando reducir el déficit a costa del alumnado y de la sanidad», ha aseverado la diputado socialista.
La escuela como «campo de batalla»
Por parte del grupo MÉS per Mallorca, Antoni Alorda ha acusado al ejecutivo autonómico de haber convertido «la escuela en un campo de batalla cuando la educación era la apuesta clave y estratégica del Govern».
También ha echado en cara a los populares que las cuentas de la comunidad de 2014 son «una estafa a lo que prometió el PP, tras años de récord en gasto educativo en la pasada legislatura».
Leyendo los comentarios, es difícil hallar uno redactado en perfecto castellano. Y el catalán o baleárico, como más guste al distinguido público, se desgrana, a su vez, en varios idiomas de libre y autodidacta gramática. Ante tales desatinos, nuestras autoridades nos exigen el inglés como tercer idioma. Nueva que aplauden los británicos residentes y su prole a fin de no perder, ellos también, su identidad. Marià Aguiló i Fuster, nuestro poeta y lingüista mallorquín, chueta y de buena posición económica, según Wikipedia, dijo, ya en el Siglo IX: “Poble que sa llengua cobra es recobra a si mateix”.