La modificación del reglamento que establece los requisitos para la indicación geográfica protegida de las «hierbas ibicencas» enfrenta actualmente a los productores locales. El Consell estudia incluir el procedimiento de elaboración tradicional de las casas payesas que es «exclusivamente por maceración», una intención que ha motivado el desacuerdo de la destilería Marí Mayans, que cumple con todos los procesos de destilación, maceración e infusión que exige el reglamento actual, y que critica que este cambio en las «reglas de juego a mitad de partido» puede tirar todo su trabajo «por el suelo».
Así lo asegura el gerente de la empresa, Carlos Marí Mayans, que cree que el Consell quiere cambiar el reglamento «para dar cabida a los que no lo están cumpliendo». La regulación para otorgar el sello de indicación geográfica a las hierbas ibicencas fue aprobado en 1996 por la Conselleria balear de Agricultura i Comerç y, según Marí Mayans, «desde el año 2000 se han inscrito cinco productores más, que lo han hecho como a su entender son las hierbas ibicencas y no como está regulado». «Muchos payeses cogen plantas del campo y maceran anís en su casa, y dicen que las hierbas se hacen así. Sí, se hacen así en tu casa; a nivel industrial está regulado como tiene que ser por cuestión técnico sanitaria y de calidad», añadió el empresario.
Adaptación a la UE
La Conselleria insular de Agricultura que dirige Antoni Marí Marí, Carraca, trabaja en la «adaptación» de este reglamento a los requisitos de la Unión Europea, que debe realizarse antes de febrero de 2015, y que se prevé hacer por «consenso» entre los productores. Para ello, «se está completando la información» que no tiene el actual reglamento como un expediente técnico sobre las «características físico-químicas y sensoriales» del producto mediante «un análisis de laboratorio para efectuar la caracterización, así como un estudio de su vínculo con el territorio», explica la institución.
La inclusión de la maceración como requisito de elaboración no viene requerida por la Unión Europea y, en todo caso, deberá tener «un procedimiento de tramitación diferenciado» según el alcance de la modificación prevista, señalan desde el Consell.
«Se estudia la posibilidad de que entren determinados aspectos aprovechando la modificación. No veo que se tenga que estar cerrado a nada ni tener nada como inamovible», señala el conseller Antoni Marí Marí, Carraca, para quien en este tema «cada uno cuenta la cosa como le va bien» mientras lo que se busca es «definir desde un punto de vista natural y tradicional cuál es la forma de hacer las hierbas, y en cualquier caso, cuál es la más antigua», detalla.
«Desde la institución insular lo que no podemos es hablar de marcas ni de favoritismos, tenemos que ser serios y, vistas estas circunstancias, indagar qué es lo más antiguo, el huevo o la gallina. Pero que se va a modificar el reglamento de capricho para que unos u otros tengan ventajas, no, el reglamento se va a modificar para adaptarse a la normativa europea y lo que está sobre la mesa es analizar si se debe incluir o no», destaca el conseller.
«Mera competencia»
Sin embargo, el gerente de Marí Mayans insiste en que la Unión Europea «pide una transposición y no cambiar el reglamento», y por ello, ya ha consultado con un bufete de abogados especializado en materia de denominaciones de origen porque si se modifica no dudará en «llegar hasta donde tenga que llegar».
Otros productores prefirieron no hacer comentarios al respecto y señalar como interlocutor al Consell, mientras que el responsable de Bodegas Can Rich, Toni Costa, negó que haya problemas entre productores sino «una mera competencia». «No hay nada que decir sobre esto todavía. Estamos hablando de un reglamento que se tiene que arreglar y son pequeños detalles, pero todo llegará a buen puerto. Son matices muy pequeñitos de elaboración», asegura el productor.