El grupo Cursach ultima un acuerdo para explotar cuatro hoteles propiedad de Abel Matutes, en Magaluf. El objetivo es vincular los establecimientos a la marca BCM, la conocida discoteca de Cursach en la zona, que también podría dar nombre al complejo hotelero.
El director general del grupo de ocio, Tolo Sbert, explicó que están negociando con un inversor inglés –quien ha alquilado los establecimientos– la futura gestión de los hoteles. Se trata del Mallorca Rocks, el Sahara, el Magamar y el Tropical.
El objetivo es explotar un complejo hotelero vinculado al ocio. «Queremos dirigirnos a un público joven, de entre 18 y 40 años, que reserva a través de internet y que realiza viajes de unos cinco días», manifestó.
En este sentido, detalló que no se trata de reproducir el modelo de Mallorca Rocks en todos los establecimientos, pero sí de orientarlos a un público joven con productos para ese tipo de clientes, como bares y piscinas con un plus de diversión.
Además, para captar público el grupo usaría su principal marca, BCM, de modo que «los artistas que actúan en la discoteca serían un reclamo para los hoteles». Según Sbert, la zona «carece de este tipo de oferta y creemos que puede ser atractiva».
Inversión
El proyecto supondrá una reforma de modernización «importante» ya que los hoteles pasarían a ser de cuatro estrellas y aumentar así de categoría. Sin embargo, según Sbert, todavía no han calculado el coste total de la inversión.
La reforma se centraría principalmente en las zonas comunes. Se tratará de un conjunto de unos 1.000 apartamentos que, en principio, abrirán con el nuevo concepto en 2015 y se desarrollará en tres años.
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