Después de que cerca de 25.000 personas salieran a la calle el pasado domingo en las cuatro islas de Balears contra las prospecciones petrolíferas y se hayan presentado cerca de 50.000 alegaciones al proyecto de extracción de hidrocarburos en el Golfo de Valencia, ayer la empresa Capricorn Spain -filial de Cairn Energy- la responsable de realizar estas prospecciones, aseguró a través de un comunicado que muestra su respeto a «todos los puntos de vista» que los «grupos de interés» tengan en relación del proyecto y el derecho a expresar sus opiniones, pero aseguró que en todas las zonas donde operan realizan un trabajo de consulta con las «comunidades locales» para «comprender y conocer cuáles son sus preocupaciones y desarrollar planes que los tengan en consideración.
En este sentido, la empresa británica recordó que el área en el que se llevarán a cabo las operaciones se sitúa a una distancia aproximada de 50 kilómetros de Valencia; 53 kilómetros de Eivissa y a 32 de las islas Columbretes, y especificó que el momento en el que se adquirirán los datos será «cuando los impactos sean mínimos, es decir, durante los meses de invierno».