El Ayuntamiento de Sant Joan ha dado dos semanas de plazo al Obispado de Eivissa y Formentera para que derribe la obra ilegal que acometió el pasado mes de septiembre sobre el techo de la casa parroquial. La reforma consiste en la construcción de una estructura de hormigón destinada a cubrir la salida de una escalera que conduce al tejado, y se realizó sin licencia durante unos trabajos de cambio de tejas y arreglo de muros exteriores para lo que sí se había concedido el permiso.
Por esta infracción urbanística, el Obispado también deberá abonar una multa de 624 euros correspondientes al 5% del coste de la obra, que ascendió a 12.000 euros. Se trata de un precio bonificado, ya que la Diócesis se ha comprometido a llevar a cabo la demolición la próxima semana, dentro del plazo establecido.
Cabe recordar que esta obra ha modificado la altura del edificio protegido con la figura de Bien de Interés Cultural (BIC), en una zona declarada conjunto histórico, como es el pueblo de Sant Joan. Por ello, el Consell, que tiene las competencias en Patrimonio, también estudió en su momento abrir un expediente, cuyo resultado, por el momento, se desconoce.
La resolución del plazo para derribar la obra sin licencia se adoptó ayer en el Ayuntamiento de Sant Joan, tras la comisión informativa del próximo pleno municipal que se celebrará el lunes.
El concejal de la oposición, José Luis Rodríguez, preguntó por el estado del derribo de estas obras, ya que la licencia para la demolición se concedió el pasado 24 de febrero y ya entonces «tenían quince días para demolerlas». «He pedido el estado del expediente y se ha llegado a un acuerdo para el plazo», destacó el concejal, que tras la reunión le comunicaron que la Iglesia acometerá la demolición la próxima semana. «Si no me llego a meter ni lo derriban ni nada», añadió.
Por su parte, el alcalde Antoni Marí Marí Carraca negó que el Obispado se haya pasado un primer plazo de demolición. Según explicó, cuando se presentó el proyecto de derribo, el pasado mes de febrero, no se contempló un plazo, a diferencia de la situación actual, en la que sí se establece un período «expreso». «Lo van a tirar ya», destacó Carraca, que cuestionó las críticas Rodríguez. «Aquí hay gente que no sabe de lo que habla», afirmó el alcalde de Sant Joan.