El nuevo sistema de cobro del párking de la Marina empezó a funcionar el pasado 23 de junio y desde entonces el caos se repite cada noche en esta zona del puerto de Vila con atascos de más de media hora para salir.
Los comerciantes, los taxistas y los vecinos han denunciado esta situación, que según aseguran se produce porque hay una sola máquina de cobro, situada en el edificio de la antigua estación marítima, y por la falta de información. «Los usuarios no saben que tienen que pasar por la máquina antes de salir por la barrera», explica Pep Tur, comerciante de la Marina, que asegura que «tienen que dar la vuelta y volver a hacer la cola, por lo que por las noches «se monta un cacao tremendo».
A parte, los particulares solo disponen de 15 minutos gratuitos, pero no se facilita ninguna información sobre si hay plazas libres, por lo que la gente entra y «llegan a pagar sin poder aparcar», según explica una usuaria, que apunta que la máquina, además, solo acepta monedas.