«Por favor tened cuidado si paseáis por Platja d'en Bossa. Mi perro comió algún veneno, por suerte lo reconocí y lo llevé rápidamente al veterinario», advirtió Nikki Miller-McCall en Facebook la semana pasada. Según esta chica inglesa residente en Eivissa, los efectos tardaron 20 minutos en aparecer y alertó a los dueños de perros pequeños que vayan con especial cuidado ya que ellos no disponen de tanto tiempo para reaccionar pues el veneno hace efecto antes si los animales son de menor tamaño. Según Miller-McCall, dueña de Marley, el primer síntoma que sufrió su mascota fue un fallo en las piernas traseras: «El perro luchaba por levantarse sin éxito, luego rechazaba todo tipo de bebida y comida y las encías adquirieron un color rosa pálido», describió en Facebook. Por suerte en esta ocasión llegaron a tiempo al veterinario y pudieron salvar la vida de Marley.
Este es el séptimo caso de envenenamiento que ha salido a la luz en Eivissa. De estos siete casos han fallecido tres perros y un gato debido a la ingesta de veneno.
La Guardia Civil sigue investigando estos casos de intoxicación aunque según explicaron, «hay que pillar al autor in fraganti», tienen algunas sospechas pero «es bastante complicado» dar con el autor de los envenenamientos, apuntaron.
Redes sociales
Por otro lado, muchos ciudadanos ibicencos han utilizado estas últimas semanas las redes sociales para denunciar tanto los casos de envenenamiento como el hallazgo de presuntas substancias tóxicas abandonadas en la vía pública y mezcladas con comida.
En este sentido, el pasado viernes un usuario advertía que en un punto de la ronda E-10 de Eivissa cerca de la comisaría de la Policía Nacional se habían encontrado restos de comida «con moho y polvitos por encima» que, según esta persona, tenían «pinta de veneno».
Esta publicación incluía una fotografía (reproducida a la derecha).
Indignación
La presidenta de la asociación RqueR Adoptando en Ibiza, Rocío Muñoz, explicó que el año pasado también hubo casos de envenenamientos en Vila, concretamente en la plaza del Parque «pero este año es mucho más grave», dijo. Muñoz advirtió de la peligrosidad de este veneno ya que no sólo los animales se ven amenazados sino que hasta un niño pequeño puede meterse algo en la boca. «Aconsejamos a la gente que esté alerta y vigile a sus mascotas», y manifestó su indignación hacia la persona culpable de la intoxicación: «Si alguien está harto de ver excrementos de perro en la calle o perros sueltos donde no pueden estarlo que denuncien al dueño que es quien realmente tiene la culpa y no el perro», lamentó.
Síntomas del veneno
Según el veterinario de la clínica Eivivet, Santiago Yepes, los envenenamientos suelen ser con matarratas o con matacaracoles. En el caso del matarratas los síntomas son hemorragias internas ya que es un anticoagulante, en este caso «si se coge a tiempo hay un antídoto que es la vitamina K», explicó Yepes.
En cambio con el matacaracoles o insecticidas no hay antídoto, los síntomas son convulsiones y ataques epilépticos, así como salivación y vómitos. Según Yepes, en este caso «hay que hacer vomitar al animal y dependiendo de la cantidad que haya comido los síntomas serán mas o menos leves».
Yepes recordó que hace unos 12 años hubo una oleada de envenenamientos en el barrio de ses Figueretes: «Llegué a tener 15 perros intoxicados en la clínica en una misma noche», recordó, «pero nunca se cogió al autor de las intoxicaciones».