El conseller d'Indústria i Energia del Govern balear, Joan Boned, anunció ayer en el pleno del Parlament que el objetivo del Ejecutivo a largo plazo es sustituir la actual estación eléctrica de es Ca Marí de Formentera, por una nueva. En este sentido, la diputada por Formentera, Silvia Tur, recordó que hay un proyecto paralizado en el Ministerio de Industria porque está pendiente de la declaración de resolución de compatibilidad. «Si GESA no tiene la infraestructura necesaria es porque no hay voluntad política en Madrid», aseguró Tur, que pidió a Boned que insista para que esta instalación «sea una realidad en breve».
Según explicó Tur, la estación cuenta con una turbina desde 1999, por lo que su vida útil ha caducado «hace tiempo», lo que provoca que para garantizar el suministro eléctrico durante los meses de verano se tengan que instalar hasta once grupos de electrógenos que suponen una carga de entre diez y doce viajes diarios de camiones con gasoil desde Eivissa. En este sentido, recordó que los problemas de insonorización y calidad del aire están haciendo «la vida muy complicada» a los vecinos de la zona.
Mejoras para 2016
El conseller Joan Boned explicó que tras visitar la instalación pudo constatar que está «en un estado detestable e inasumible». A corto plazo, anunció, que han requerido a GESA que doten de una infraestructura a estos cinco grupos electrógenos y que pongan un aislamiento «correcto». Además, han pedido que los humos que provoca la estación no vayan a nivel del suelo «como pasa ahora, que van directamente a los jardines de las casas». «Haremos un seguimiento exhaustivo y buscamos que para el verano de 2016 ya se note el cambio», apuntó Boned, que destacó que también están trabajando para instalar dos nuevos cables submarinos de conexión entre Eivissa y Formentera «con una potencia suficiente» para dar el servicio necesario en temporada alta.