El coro de la Parroquia de Santa Cruz cumple diez años. Esta formación, que nació gracias a la iniciativa del entonces cura de Santa Cruz y que ahora ejerce en Sant Jordi, Pedro López, festejará esta tarde su décimo aniversario con la celebración de una misa a las 19.30 horas. En la Eucaristía participarán los 28 miembros del coro de Santa Cruz, dirigido desde hace seis años por Elena Prokhorova, diplomada en Dirección Coral y profesora de canto en Rusia y Alemania desde hace veinte años y los últimos nueve en Eivissa. Junto a los anfitriones, cantará también el coro del Conservatorio de Eivissa, dirigido por Nélida Bonet.
Una vez finalizada la misa, se inaugurará una exposición fotográfica de la historia del coro en la primera planta.
Para finalizar, el salón parroquial será el escenario de un concierto conjunto, que está previsto a las 20:30 horas. Éste irá precedido de unas palabras del párroco Pedro López, el primer director y fundador del coro.
Los primeros en subir al escenario serán los invitados, el coro del conservatorio. Tal y como aseguró Elena Prokhorova, para abrir boca deleitarán al público con la interpretación de «tres canciones ibicencas». Seguidamente le tocará el turno al coro de Santa Cruz, una de las formaciones corales más importantes de la isla.
Su repertorio constará de cuatro canciones. Así, empezarán por Eivissa, una canción dedicada a la isla, y al amor que sienten por nuestra tierra, y le seguirán Ojos verdes y Ojos de España, para terminar con un popurri de canciones clásicas de diferentes óperas de Mozart, Beethoven y Verdi.
Al finalizar el concierto, y para cerrar la fiesta de celebración, habrá «algo de picar» para todos los asistentes, aseguró Prokhorova.
Aprender a cantar
El coro de la parroquia de Santa Cruz, que ha conseguido colocarse entre los más distinguidos de la isla, ensaya tres días a la semana. Tal y como explicó su directora, «los lunes los dedicamos a canciones populares, los jueves a temas religiosos y los domingos se juntan de nuevo para cantar en la misa que se celebra en Santa Cruz».
Elena Prokhorova envió una invitación a todo aquel interesado en el canto, para poder asistir a los ensayos: «La puerta está abierta para todo aquel que tenga voz», aseguró. «No importa si lo hace mejor o peor, aquí ensayamos mucho, tenemos paciencia y todo el mundo interesado puede aprender», apostilló.
Además de aprender a cantar, «hasta en siete idiomas», entre los que se encuentra el «francés, italiano, hebreo o incluso japonés», los integrantes del coro hacen salidas anuales y pasan un buen rato. El objetivo más grande, aseguró Prokhorova, es «juntarse para dar alegría al alma», algo que llevan haciendo ya 10 años, y que piensan hacer, por muchos más.