La Fiscalía de Eivissa y el Govern rechazaron ayer la adopción de las medidas cautelares solicitadas por la Associació Animalista de les Illes Balears (Assaib) respecto al exterminio de la cabras de es Vedrà y sus consecuencias, ya que mantienen que la retirada de las 3 ó 4 cabras vivas que quedan conlleva un alto riesgo para la integridad de las personas, mientras que las muertas no suponen ningún problema añadido porque «sólo quedan huesos y cuero».
En la vista celebrada ayer en los juzgados de Isidor Macabich, la titular del juzgado de Instrucción número 1, Maria Luisa Bustillo Gandarillas, escuchó los argumentos del representante de Assaib, la representación legal del Govern, los informes del Seprona de la Guardia Civil y la representante del Ministerio Fiscal.
La asociación animalista solicita el decomiso de las cabras que sobrevivieron a la matanza y la retirada de los restos de las muertas ya que, según subrayó el abogado Víctor Valladares, las cabras muertas, con los restos de plomo de la munición, «están causando un daño a la fauna y la flora que el Govern decía defender».
Rechazo de la fiscal
El Ministerio Fiscal fundamentó su postura en el informe elaborado por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.
El documento aportado, que estaba acompañado por material gráfico, indica que las cabras están localizadas en un «terreno muy escarpado y de difícil acceso» por lo que desaconseja enviar personal a recoger las cabras ya que conlleva un riesgo importante par la integridad de las personas.
El representante legal del Govern también se opuso a las medidas cautelares alegando que la única manera de llegar a las cabras sería con un operativo que incluiría la participación de un helicóptero y ello supondría un elevado coste económico, además del alto riesgo para la integridad de las personas que participasen en el operativo.
Además, alegó que los ejemplares vivos, en el supuesto de ser trasladados, podrían transmitir enfermedades a otros animales. Valladares alegó que los vecinos de es Vedrà «comen cabras de la isla y nunca les pasó nada».
Assaib seguirá luchando
«Estamos denunciando un supuesto delito contra los recursos naturales y la fauna, porque entendemos que la forma de sacrificar las cabras con unos proyectiles de plomo han contaminado los cadáveres de los animales muertos y está causando un daño a la fauna y al medio ambiente», señaló a las puertas del juzgado el representante legal de Assaib, Víctor Valladares, quien dijo no entender la postura del Ministerio Fiscal.
También pedíamos el decomiso de las cabras vivas, de las que se encargarán una protectora de animales. Para retirar a las cabras que sobrevivieron a la matanza, la asociación propone el conocido como ‘método Judas', que consiste en soltar una cabra domesticada para que atraiga al resto a una zona segura para poder retirarlas, explicó el abogado que defiende los intereses de Assaib.
Valladares recordó que la denuncia es contra la directora general de Espais Naturals i Biodiversitat, Caterina Amengual, y contra el conseller de Medio Ambiente, Miquel Vericad porque la medida que adoptaron «fue un desastre moral y éticamente. Es más, también fue un desastre legalmente hablando porque contraviene la normativa europea, estatal e, incluso, administrativa», subrayó. «No han aceptado las medidas cautelares, pero seguimos con la denuncia contra el Govern y el conseller. Hemos aportado un informe veterinario suscrito por cinco veterinarios de diferentes partes de España que refuerzan nuestras alegaciones», añadió el abogado.
Escuchadas las partes, la jueza tomará una decisión que se demorará una o dos semanas.