La agrupación de empresas de transporte Sagalés formalizó la semana pasada la compra de la compañía de transporte de viajerios Autobuses Sant Antoni, S.A., según expresó ayer Sagalés a través de un comunicado. Autobuses San Antonio tiene una flota de 18 vehículos y una plantilla de 30 trabajadores. La empresa Sagalés explicó ayer que con esta adquisición pasarán a gestionar también la línea regular Sant Antoni-Eivissa. Cabe destacar que el año pasado Sagalés compró la empresa HF Vilás, por lo que pasó a gestionar la línea Santa Eulària-Eivissa y Santa Eulària- Es Canar, entre otras.
Trayectoria
La empresa de transporte catalana explicó ayer que con la compra de Autobuses San Antonio quieren «dar continuidad a la actividad emprendida por Autobuses San Antonio». En esta misma línea, la familia Ribas, antigua propietaria de Autobuses San Antonio, transmitió un mensaje de agradecimiento «a todos los colaboradores que directamente o indirectamente han formado parte de la empresa de autobuses de Sant Antoni y les desea lo mejor en esta nueva etapa de la compañía».
«Esta operación refuerza la estrategia de crecimiento de Sagalés. Autobuses San Antonio se integra así en un importante grupo de empresas dedicadas al transporte de viajeros en todas sus vertientes (regular, discrecional, turístico, etc.) con una larga trayectoria en el sector, un equipo altamente especializado y una flota moderna y elegante de más de 550 vehículos», explicaron desde Sagalés.
Sagalés es una empresa familiar con más de 370 años de trayectoria dedicada al transporte de viajeros.
Vilas, Autobuses San Antonio y Voramar el Gaucho estos tres que se opusieron a la apertura del Cetis, buscaron firmas para ello implicando (obligándoles) a todos sus trabajadores a recoger firmas para ello. Pusieron no se cuantas denuncias para evitar su apertura y luego su cierre, presionaron a los políticos del PP para que evitaran que hubiera una estación de autobuses. Ahora se descubre que su motivación era la revalorización de sus empresas para venderlas al mejor postor. Que cara de tontos se les queda a los que colaboraron en buscar firmas y los políticos que ayudaron a boicotear la estación del Cetis.