La discoteca Space Ibiza bajó ayer el telón tras 27 años de historia. La archiconocida sala de fiestas ibicenca celebró este domingo su último y más espectacular evento con motivo del Closing Party de la discoteca, el gran cierre del imperio gestado a finales de los años 80 por el empresario ibicenco Pepe Roselló.
Miles de personas llegadas de diferentes partes del mundo abarrotaron el recinto situado en Platja d'en Bossa, que a partir del próximo año pasará a manos del Grupo Empresas Matutes -propietario de los terrenos- para reconvertir el mítico club en la sesión nocturna del emergente Ushuaïa Ibiza.
20 horas de fiesta
El Closing Party de Space arrancó este domingo a las 16.00 horas y se prolongó hasta el mediodía de ayer, momento en el que dejaron de sonar los altavoces de una de las discotecas más prestigiosas del planeta. Durante 20 horas dejaron su sello personal en las cabinas de Space alrededor de 100 deejays, entre los que destacaron Tale of Us, Solomun, Marco Carola, David Morales, Erick Morillo, Cristian Varela, Los Suruba, Bob Sinclair, Sebastian Gamboa, Kölsch y, sobre todo, el venerado Carl Cox.
El artista de Barbados, alma mater de Space junto a Pepe Roselló, fue el encargado de conducir los momentos más emotivos del evento. Hacia las 02.00 horas, el templo de la música electrónica redujo sus decibelios para dar paso al mítico tema Imagine compuesto por John Lennon – que volvería a sonar horas después en la Main Room o sala principal – y a una solemne actuación de un coro con vocalistas locales que inundó de magia el escenario de la terraza trasera.
Los seis escenarios se vieron pronto desbordados por amantes de los mejores sonidos de la música House y el Techno. Durante horas, djs de talla internacional y una larga nómina de artistas locales, incluido el plantel de Ibiza Global Radio, entre los que destacaron Anna Tur, David Moreno o José María Ramon, hicieron bailar a miles de clubbers en la última y más espectacular sesión del verano ibicenco. No obstante, el dispositivo de seguridad y el despliegue de empleados y controladores de Space velaron por la seguridad de los asistentes a uno de los eventos con mayor impacto de los últimos años.
Y es que se estima que unas 15.000 personas acudieron a la fiesta más esperada de la temporada, tanto en Ibiza como en el mundo entero. Desde primeras horas de la tarde se generaron colas multitudinarias para acceder al legendario club de Platja d'en Bossa. Nadie quería perderse el punto y final de Space. El evento, por tanto, batió todos sus récords de participación y también de taquilla, disparada por unos precios establecidos en 100 euros – con dos consumiciones – sin posibilidad de reducción para residentes e, incluso de 1.000 euros en la reventa a través de distintos canales de Internet.