La protectora de animales Ibiza 4 patas ha iniciado una recogida de firmas en la plataforma Change. org para pedir la «libertad» del perro Dylan, un perro potencialmente peligroso que ingresó hace cuatro años en Sa Coma cuando fue abandonado. Por el momento, la recogida de firmas, que será entregada al alcalde de Vila y a la concejala de Medi Ambient, suma más de 430 adhesiones y cuenta con el apoyo de otras protectoras de animales como Assaib y RqR Adoptando en Ibiza. La petición explica que la protectora Ibiza 4 patas solicitó la adopción de Dylan la pasada primavera «porque en nuestra forma de trabajar con los perros es la libertad, buscando la sociabilización y siempre en continua supervisión 24 horas. Nuestra intención es darle esa oportunidad para que salga de la jaula y pueda vivir entre nosotros, en libertad y con amor. Sin embargo, nos encontramos con imposiciones y negaciones por motivos desconocidos». En octubre solicitaron la adopción «de manera oficial, con registros de entrada en el Ayuntamiento y sin recibir ninguna respuesta oficial. Lo único que conseguimos es una reunión con la concejala de Medi Ambient para enero de 2017».
La explicación
Desde el Ayuntamiento de Eivissa explicaron que Dylan era un perro de pelea «adiestrado como tal desde pequeño y, por tanto, muy agresivo». En estos cuatro años, una persona lo ha adiestrado en Sa coma para reeducarlo y, en la actualidad, no es agresivo con las personas, pero sí con otros animales. Por esta razón, las circunstancias de su adopción son muy concretas: personas que no tengan otros perros, que se saquen el permiso para tener animales potencialmente peligrosos, que tengan un espacio grande donde el animal pueda correr y que esté vallado. Según explicaron desde Vila, Dylan es un «perro feliz en opinión de los técnicos de Sa Coma; ha hecho de Sa Coma su hogar y lo cuidan todos los trabajadores». El traslado «podría ser traumático», razón por la que están estudiando el caso con detalle. Desde Vila aseguran que la decisión de sacarlo de su entorno debe ser, por tanto, meditada y se evaluará si es viable o no. La decisión se tomará de manera definitiva el mes que viene, apuntaron desde el Ayuntamiento.