El empedrado que cubría antiguamente el centro de la ciudad de Vila ha salido a la luz estos días en la calle Comte Rosselló durante los trabajos de peatonalización que se están llevando a cabo en la zona.
El hallazgo hizo que los obreros dejaran al descubierto una zanja que permitía ver esa capa inferior de la calle que ayer se cubrió con cemento para evitar accidentes durante las fiestas navideñas.
Desde el Ayuntamiento de Eivissa descartaron que el pavimento tuviera ningún valor arqueológico, ya que una primera valoración dictamina que pertenece a época moderna, a las décadas de los 60 o los 70.
No obstante, el equipo de arqueólogos municipales hará una segunda valoración de estos restos para asegurar cuál es su valor.