La plaza de España de Santa Eulària se convirtió ayer, a partir de las 18.00 horas de la tarde, en el escenario que visitó el cartero mágico de sus Majestades los Reyes Magos de Oriente para recoger los deseos de los más pequeños del municipio el día antes de la cabalgata real y de la noche de Reyes.
Desde los más pequeños hasta los de más edad esperaban pacientes la llegada del cartero real con sus cartas y deseos a entregar. Tímidos pero decididos se acercaban hasta él para leer juntos la misiva elaborada en algunos casos con mesura, pero en otros no.
Después, los niños se iban tranquilos y convencidos de que sus Majestades de Oriente recibirían los requerimientos y ya para el día de Reyes, junto al árbol, sus deseos se harán realidad.