La Conselleria d'Educació ha pedido a la empresa constructora del Conservatorio de Ibiza que asuma el coste de los desperfectos del edificio que se realizó hace seis años y que presenta problemas de estructura. «Queremos que la empresa haga las reparaciones que se ha de hacer, pensamos que es responsabilidad de la empresa. Trabajamos en este aspecto y puede haber cuestiones judiciales», dijo el conseller d'Educació, Martí March, en su visita a Ibiza en alusión al desencuentro que mantienen con la constructora para que se haga cargo del arreglo de los desperfectos ya que consideran que estaba desde que se puso en marcha el centro de estudios de música.
De hecho, desde la Conselleria d'Educació aseguraron ayer que hay un contencioso con la empresa para tratar de que asuma estos desperfectos ya que todavía se encuentran en un proceso de garantía.
Respecto a los problemas de calefacción en el centro, el conseller explicó que una empresa está evaluando el sistema de calefacción para hacer un presupuesto para su reparación ya que nunca ha funcionado. «Asumiremos el coste pero la responsabilidad del mantenimiento de calefacción de los centros de secundaria», apuntó el conseller, que recordó que en los centros educativos se está haciendo una auditoría.
Además de estas actuaciones, los técnicos del Ibisec están realizando un informe acerca del Conservatorio. «Hay problemas estructurales y de mantenimiento y miramos que se puede hacer para que tenga un funcionamiento digno», añadió. De hecho, March tiene previsto volver a Ibiza el mes que viene para visitar el Conservatorio.
El conseller se desplazó ayer a la isla de Ibiza para visitar Sa Coma y el instituto Quartó del Rei en el que abordó la posibilidad de ampliar en un futuro la oferta educativa e implantar Bachillerato. «Vamos a estudiar. Se ha de ver el tipo de estudios con demanda y si es posible, ponerlo en marcha», dijo March, que se reunió con la comunidad educativa del segundo instituto de Santa Eulària.
El conseller d'Educació también se refirió al proyecto del desdoblamiento del colegio de Sant Carles, que responde a un convenio con el Ayuntamiento de Santa Eulària. «Es un acuerdo político. El desdoblamiento es una respuesta para abordar las necesidades de escolarización», dijo.
March reconoció que «en Santa Eulària puede haber la necesidad de otro centro pero no se puede hacer un centro si no se tiene el solar adecuado. Estamos de acuerdo con el ayuntamiento y seguimos hablando para dar respuesta a las necesidades que pueda haber».