Xelo Huertas y Montse Seijas estrenan ubicación en el Parlament después de su baja en el grupo parlamentario de Podemos. A partir del miércoles, que es cuando se reanudan los plenos de la Cámara, se sentarán entre los escaños de Ciudadanos (C's) y los del Partido Popular.
Ambas, quedarán a la izquierda de Xavier Pericay (C's) y la derecha del escaño que ocupa ahora la ‘popular' Cabrer. Hubieran preferido sentarse detrás del PSIB y Més, junto a Silvia Tur
(Gent per Formentera) pero la izquierda se impuso en la votación de la Junta de Portavoces de ayer. La reasignación de escaños también afecta al PI. Ningún hueco, como ocurría ahora, separa a Josep Melià de los otros dos representantes del grupo.
El cambio de escaños, un asunto en apariencia menor, también se analizó en clave política. En opinión del PP, las dos diputadas deberían sentarse en el lado izquierdo del arco parlamentario. Jarabo, de Podemos, ironizó: «Ya no las quieren ni a su lado después de apoyarlas durante el bloqueo». También se quejó Jaume Font (PI) pese a que el su grupo se sentará unido: «El único portavoz de cambia de sitio soy yo», ironizó.
Sin embargo, tanto Prohens como Font incidieron en algo que no sucederá en el pleno del miércoles día 1 de febrero: la elección del presidente, o presidenta, del Parlament. La primera sesión del periodo ordinario la presidirá Vicenç Thomàs.
Maicas o Picornell
No será hasta el día 7 cuando se decida el relevo de Huertas. Para entonces ya se sabrá si la ‘podemista' Marta Maicas sigue imputada después de su declaración, el día 1, como consecuencia de una querella de Montse Seijas.
Aunque Jarabo mantuvo que la imputación de Maicas no supondría su baja en el partido (no es por un caso de corrupción), el resto de partidos han puesto ciertos reparos. Tanto Bel Busquet (Més) como Andreu Alcover (PSIB) insistieron en que Podemos tiene que proponerles un nombre que garantice una estabilidad sin sobresaltos.
Jarabo lamentó la «insistencia en determinadas garantías un tanto exageradas» que se le piden a Podemos para presidir el Parlament cuando este partido no cuestionó en 2015 ninguno de los nombramientos del PSIB y Més. En su opinión, los socialistas «hacen un diagnóstico de la situación un tanto dramático». Jarabo dio a entender que su principal candidato es Baltasar Picornell, aunque no descartó a Maicas y señaló que no será hasta la semana que viene cuando este asunto se aclare. Decidirán todos los partidos del pacto.
La salida de Huertas de la presidencia del Parlament no le supondrá, de entrada, ningún quebranto económico. Más bien al contrario. Como no tendrá que pasar parte de su sueldo a Podemos, podrá cobrar más de los 2.150 euros netos al mes (sin contar añadidos que percibía al frente de la Cámara. El sueldo bruto mínimo de un diputado o diputada con dedicación exclusiva es de 59.000 euros al año.