Dos años de prisión e indemnizar a las víctimas con la suma de dinero correspondiente al valor de los efectos sustraídos. Es la pena impuesta ayer a dos jóvenes de 30 años condenados por un delito continuado de robo con fuerza en casa habitada.
I.T.B., y V.K.R., de nacionalidad rumana, reconocieron ante el tribunal las acusaciones y aceptaron el acuerdo de conformidad alcanzado previamente entre sus abogados y el Ministerio Fiscal.
La jueza del juzgado de lo Penal número 1 de Ibiza, Clara Ramírez de Arellano, dictó sentencia in voce y recalcó a los dos acusados que la pena queda suspendida durante tres años «siempre y cuando no vuelvan a delinquir. Si en este tiempo cometen algún tipo de delito, la suspensión quedará automáticamente revocada», subrayó la jueza.
La fiscal solicitaba en un principio cinco años de prisión. La reducción de la pena refleja el atenuante muy cualificado de la reparación del daño.
Los dos jóvenes, que estaban en prisión provisional desde el pasado 8 de septiembre, deberán abonar a una de las víctimas el valor del ordenador y otros efectos robados en su vivienda.
Cazados tras un robo
Los dos jóvenes fueron detenidos por agentes del Área de Investigación de la Guardia Civil cuando circulaban por el camí des Fumeral tras perpetrar el golpe por el que ayer fueron juzgados.
Los agentes habían acudido a la zona alertados por unos vecinos que se habían topado con los dos hombres en el interior de su propiedad.
Los dos acusados abandonaron el lugar con un turismo Volkswagen Passat y sufrieron un accidente contra un muro, momento en el que fueron detenidos por los agentes de la Guardia Civil que les venían siguiendo.
En el registro del vehículo, los agentes localizaron varios efectos que habían sido sustraídos en viviendas de esta zona de Sant Josep. Entre los objetos habían joyas, material tecnológico y teléfonos de alta gama o tabletas.