La plataforma de alquiler urbano y vacacional Airbnb, uno de los portales que se vigilan con lupa por permitir la comercialización de alojamientos que carecen de licencia turística, mantiene actualmente más de 2.500 anuncios activos de alquileres en la isla de Ibiza.
En una búsqueda detallada por precios, realizada por el abogado e ingeniero ibicenco Sergio Carrasco y cotejada también por esta redacción, para el destino Ibiza se muestran un total de 2.548 anuncios activos. Hay que tener en cuenta que en la búsqueda general Airbnb establece como límite ‘más de 300', pero estrechando los filtros la oferta se dispara. Entre todos ellos se incluyen casas de campo y villas, apartamentos y pisos en edificios plurifamiliares, así como habitaciones privadas y habitaciones compartidas; es decir, camas individuales.
En otra búsqueda más pormenorizada, en este caso por precios y también por municipios (a través del código postal), el número de avisos se dispara hasta los 3.981, pero en algunos casos los anuncios están duplicados. Sant Josep aglutina buena parte de los anuncios mostrados por este portal de Internet, 1.204, lo cual tiene sentido al ser el municipio con mayor extensión y viviendas diseminadas.
En el caso del municipio de Eivissa aparecen 736 anuncios; en Sant Antoni 856; en Santa Eulària 803 y en Sant Joan 382. Cabe destacar que alrededor de 150 de los 2.500 anuncios encontrados se comercializan por más de 1.000 euros la noche. Uno de los alojamientos más caros es una villa de 8 habitaciones y 10 camas situada en Cap Martinet por la que piden 9.500 euros por noche.
La plataforma con base en California no exige el número de registro que otorga el Consell d'Eivissa a las estancias que están dadas de alta en Turisme, y prácticamente ningún alojamiento exhibe dicha garantía.
En este sentido, el pasado viernes la asociación Terraferida dio a conocer un informe que refleja que Airbnb ofrece en Mallorca un total de 11.271 alojamientos con capacidad para 78.543 plazas, pero ninguno de ellos declara tener licencia turística. También anunció que en 2015 se sumaron un total de 550.283 estancias en estos alojamientos.
LA NOTA
Al menos 10 sanitarios renunciaron en 2016 a trabajar en Can Misses
Al menos una decena de profesionales sanitarios renunciaron el año pasado a trabajar en Can Misses por problemas derivados de la falta de alojamiento. Según explicaron fuentes del Área de Salud de Ibiza y Formentera, siete profesionales declinaron trabajar en el área de Atención Primaria como refuerzos estivales y para cubrir vacaciones. “Habiendo ofertado esos puestos no se llegaron a cubrir básicamente por el tema de la vivienda”, señalaron fuentes hospitalarias.
Tampoco se cubrieron “entre tres y cuatro” plazas en Urgencias, en este caso de médicos a quienes se les había ofrecido un contrato para la temporada de verano.
“En este caso, no sabemos a ciencia cierta si fue por la vivienda, pero no fue posible contratarlos”, aseguraron estas mismas fuentes.