La Floristería Eivissa, fundada en el año 1979 por el vecino de Vila Bartomeu Escandell Ribas, más conocido como Bartolo de ses Flors, y por su mujer Maria Salvador Riera, echó ayer el cierre definitivo a las puertas del negocio tras casi 40 años de servicio, según explicaron los hermanos Jordi, Joan y Anna Maria Escandell Salvador, quienes explicaron que su madre se jubila «para tener un merecido descanso». La familia celebró durante la tarde de ayer el último día de apertura del emblemático comercio local, ubicado en el callejón que une la Avenida de España con la Vía Púnica.
Por la mañana, el Ayuntamiento de Vila hizo entrega a Maria Salvador Riera de un huevo de avestruz pintado, adquirido en el Museo Arqueológico, un obsequio otorgado por su vinculación con el barrio.
Al acto también asistieron Beatriz Casado y Catiana Fuster, representantes de la Asociación de Comerciantes de Sa Capelleta.