Productos típicos, artesanías, artículos de bisutería y joyería, prendas de ropa de todas las tendencias y estilos, calzado para niños y adultos, juguetes, cosméticos, flores y plantas ornamentales, material agrícola y de jardinería, talleres lúdicos para el público infantil, actuaciones musicales en directo, así como un buen número de puestos de alimentación para todos los gustos y paladares entretejieron ayer, con casi un centenar de stands, una verdadera fiesta activa del comercio que inundó de animación durante toda la jornada la avenida de Sant Jaume de Santa Eulària.
Con motivo de la celebración de la décima edición de su Feria de Stocks, la Vila des Riu se transformó, desde primeras horas de la mañana, en un hervidero de personas de todas las edades y procedencias que no quisieron dejar pasar la ocasión para deambular de parada en parada en busca de toda clase de ofertas con interesantes descuentos.
Carmen Ferrer, concejala de Promoción Turística y Económica del Ayuntamiento de Santa Eulària, destacó que «este evento pretende ser una muestra de lo que es nuestro pequeño comercio y una manera de darles un impulso a todos estos establecimientos para que puedan darse a conocer y exponer directamente al cliente los diferentes productos que comercializan».
«La experiencia, al igual que en otros años, está siendo muy buena. Si atendemos a la gran afluencia de público que estamos teniendo, el balance es muy positivo en todos los sentidos para la promoción del comercio de nuestra localidad», añadió la edil santaeulaliense.
Verónica Marí, copropietaria de La Coquette, indicó que los artículos que tenemos aquí están muy rebajados y con descuentos de hasta el 50 y el 60%. Esta feria está muy bien porque viene mucha gente con ánimo de comprar, pero creo que se debería hacer una, por lo menos, en cada temporada del año».
Chelsea Van Dekerckhove, una turista belga que curioseaba atentamente por la feria, señaló que «es la primera vez que vengo a Ibiza y esta feria me está gustando mucho». «Me parece todo muy interesante porque es muy diferente a lo que puedes encontrar en mi país. El ambiente es increíble, la gente es muy amable y la comida aquí es verdaderamente fantástica», aseguró.