El Grupo Popular en el Ayuntamiento de Eivissa exigirá al equipo de gobierno en el próximo pleno que haga cumplir las ordenanzas que prohíben la venta ambulante en todo el municipio por el perjuicio que ocasiona al pequeño comercio y por la mala imagen que transmite de la ciudad.
Los populares quieren que el Ayuntamiento asuma el compromiso de luchar activamente contra la venta ambulante ilegal, «realizando todos los esfuerzos necesarios para evitar que se lleve a cabo».
Los concejales explicaron que se ha detectado un incremento notable de la actividad de los vendedores ambulantes ilegales, especialmente en las playas del municipio. Este incremento se centra sobre todo en las playas, pero también en diferentes lugares especialmente turísticos, así como en las cercanías de mercados.
«En la playa de ses Figueretes, la frecuencia con la que los vendedores ambulantes ofrecen sus productos es inferior incluso a los diez minutos», según afirmaron ayer los populares a través de un comunicado.
Perjuicios
Por otra parte, recordaron que esta actividad económica «perjudica al pequeño comercio que paga todos sus impuestos, cumple con todas las normativas y, sin embargo, tiene que hacer frente a esta competencia desleal».
El PP de Vila denunció también la actitud de «permisividad, consentimiento o tolerancia» del Ayuntamiento hacia estas actividades irregulares y la «incapacidad» del gobierno de PSOE- Guanyem para adoptar las medidas oportunas para hacer cumplir sus propias ordenanzas.
«El Ayuntamiento no puede volver la vista hacia otro lado y debe afrontar, de una vez por todas, este problema y erradicarlo de nuestras calles y plazas», han indicado desde el Partido Popular.
LA NOTA
Campaña ciudadana
Con el objetivo de acabar con la venta ambulante en las playas del municipio, los concejales del PP proponen que el Ayuntamiento de Eivissa se comprometa a llevar a cabo una campaña destinada a informar a los ciudadanos y también a los turistas sobre la ilegalidad de estas prácticas. Además, solicitan al equipo de Gobierno que establezca unos protocolos sociales para dar una salida laboral y social a las personas que se ven obligadas por necesidad a practicar la venta ambulante sin ningún tipo de licencia.