«Pido perdón a la víctima y a los familiares. Estoy avergonzado por lo que hice y espero aprender la lección. No esperaba cometer este error. Pido perdón a la víctima». Son palabras de Gerson S.O., condenado ayer a ocho años de prisión por un delito de asesinato en grado de tentativa por asestar una docena de cuchilladas a una joven a la que previamente había tratado de asfixiar con sus manos.
El joven de 33 años fue juzgado ayer por la seccción primera de la Audiencia de Palma por los hechos ocurridos la madrugada del 17 de marzo de 2015 en la vivienda de la víctima en Cala de Bou.
G.S.O., quien estaba en prisión provisional desde dos días después de la agresión, reconoció los hechos y aceptó el acuerdo de conformidad que previamente habían cerrado las partes y el Ministerio Fiscal. La condena también refleja una prohibición de acercamiento a la víctima durante quince años y una indemnización de 50.500 euros.
Cosida a cuchilladas
Los hechos ocurrieron el 17 de marzo de 2015 en la vivienda de la calle Guipúzcoa donde residía la joven de 25 años víctima del ataque. A pesar de estar malherida, la joven logró zafarse de su agresor, que fue detenido 48 horas después por agentes de la Policía Nacional que le interceptaron cuando pretendía subir a un ferry en el puerto de Ibiza para abandonar la isla.
Según el relato fiscal, acusado y víctima mantenían una relación de amistad.
La madrugada de los hechos el acusado acudió a la casa de la joven y le pidió si podía pasar la noche allí. La víctima accedió a la petición y le alojó en una de las habitaciones. Apenas una hora después, en torno a las 3 de la madrugada, el acusado irrumpió en la habitación de la joven «con la intención de causarle la muerte. Aprovechando que estaba dormida, entró en su dormitorio y le agarró con las manos por el cuello, ejerciendo presión para ahogarla, momento en el que la joven despertó y logró zafarse del acusado», relata el escrito de acusación. Tras este primer intento los dos cayeron al suelo, «momento en el que el acusado, valiéndose de una navaja de 10 centímetros de hoja, le propinó varias puñaladas». El acusado no consiguió su propósito ya que la joven logró huir y refugiarse en el piso de su vecina.
La vícitima sufrió una docena de heridas incisas que requirieron para su curación un total de 500 días. La joven también sufrió trastorno neurótico por estrés postraumático.
LA NOTA
Reconoció los hechos
Gerson S.O., autor confeso de los hechos, aceptó el acuerdo de conformidad que suponía una leve rebaja de la petición inicial del Ministerio Fiscal, que solicitaba un total de 11 años de prisión y la prohibición de acercamiento y comunicación con la víctima durante veinte años. La Fiscalía también reclamaba una indemnización de algo más de 50.000 euros que mantuvo en su escrito final.