El luchador Conor McGregor aterrizó ayer en Ibiza junto a su familia y se dejó ver por la tarde en el Ocean Beach Ibiza de Sant Antoni, donde disfrutó a lo grande después de que el pasado 26 de agosto fuera derrotado por K.O. técnico por Floyd Mayweather en un combate que se celebró en Las Vegas.
‘The Notorious', apodo del luchador irlandés, prometió al finalizar el combate que viajaría hasta Ibiza para acudir a la boda de un amigo. McGregor acudió al Ocean Beach Ibiza rodeado por un séquito de guardaespaldas.
McGregor ganó 30 millones de dólares por subirse al ring y pelear contra el estadounidense Floyd Mayweather, que se llevó 100 millones de dólares por el llamado ‘combate del siglo y consiguió aumentar su récord hasta las 50 victorias por ninguna derrota.
El luchador irlandés, de 29 años, es la gran estrella de la Ultimate Fighting Championship (UFC), el mayor campeonato de artes marciales mixtas del mundo. Su récord es de 21 victorias (13 por K.O. técnico) y tan solo tres derrotas. McGregor ha sido campeón de peso pluma y peso ligero.