Casi un mes después de que este periódico destapara el caso de las multas de tráfico de Pablo Valdés impagadas y que no figuraban en la base de datos del Ayuntamiento de Sant Antoni, el teniente de alcalde rompió su silencio en el pleno de ayer para hablar por primera vez del asunto y quitarse toda la responsabilidad. «A raíz de la publicación en un medio somos conscientes de que ha habido defectos graves en la notificación de estas multas y nos parece una circunstancia gravísima por la sombra de duda que genera. Todos los vecinos de Sant Antoni tenemos que tener la absoluta garantía que la cadena de custodia y los protocolos son lo suficientemente efectivos para que esto no pueda pasar», señaló el portavoz de Reinicia.
Valdés añadió que «no hay una persona más interesada que yo en que se llegue al fondo de esta cuestión» y que no le corresponde a él probar su inocencia, por lo que «tendrán que ser los que piensen que soy culpable los que lo demuestren». Además, argumentó que no ha querido ofrecer antes sus explicaciones «porque pienso que hay acusaciones que por su poca entidad no merecen réplica», y añadió que el escándalo «se ha sobredimensionado».
El teniente de alcalde también señaló que «se está insinuando que me he querido ahorrar 400 euros y querría recordar que mi primera decisión como cargo electo fue renunciar a parte de mi salario mensual, unos 200 euros al mes».
‘Cires': «Es muy extraño»
Al finalizar el pleno, el alcalde de Sant Antoni, Pep Tur, señaló que Valdés no había pagado las multas porque estaba pendiente que se las notificara la Guardia Civil. «Por lo que sé, Valdés entendió que se las puso la Guardia Civil y no se dio cuenta de que el guardia civil se llevó la multa a que se la firmara un policía local, y entendió que le tenía que llegar de la Guardia Civil». No obstante, la notificación de la multa se produjo en el mismo momento en el que los agentes multaron al teniente de alcalde de Reinicia.
Pep Cires también destacó «nosotros de ninguna manera hemos dado instrucciones de que no se cobre ninguna multa, cosa que no sé si pasaba antes». «Nos enteramos por la prensa de que existe esta situación. Hay una persona que lo lleva a la prensa y hay una persona, la misma o no, que puntea las multas que están o no procesadas. Me parece extrañísimo porque el cuartel de la policía local no es la plaza del pueblo, entra poca gente.
Ese día había un responsable de guardia y una serie de personas y queremos saber qué ha pasado», destacó el alcalde, quien añadió que «si encontramos al culpable de que estas multas no estuviesen procesadas cuando tocaban, actuaremos».
Cires aseguró que no tiene explicación del porqué de lo sucedido: «Por eso vamos a los juzgados. Si tuviera una explicación, actuaría. Pero no la tengo». El alcalde también explicó que «se han tramitado las multas, se han cobrado y se han enviado a la DGT para que se retiren los puntos», mientras que la concejala de Governació, Aída Alcaraz, respondió con un escueto «sí» a la pregunta de si las multas anteriores y posteriores a las de Valdés se habían tramitado.
LA NOTA
Sala pide un pleno sobre su gestión como alcalde
El alcalde, Pep Tur, aprovechó el interés de los concejales del PP por las multas de Valdés para atacar la gestión de los ‘populares al frente del consistorio portmanyí. «Me gusta que se preocupen por que el Ayuntamiento deje de cobrar 400 euros pero también me gustaría que se preocuparan por las deudas que nos encontramos aquí en diciembre 2015: 10,6 millones, incobrados por 13,5 millones y 830.000 euros de intereses de demora que hemos tenido que pagar por mala gestión de ustedes con equipos anteriores. Esto es lo que me preocupa de verdad», señaló Cires.
«Su obsesión es atacar la gestión de otros. El día que quieran hacer un debate sobre todo esto lo podemos hacer. Defiendo mi gestión durante los ocho años que fui alcalde y hasta la fecha no he visto nada que tenga ratificar. Defienda su gestión y deje estar la de los otros o abra un debate», contestó Sala.